La inversión y el crecimiento económico del país son esenciales para el bienestar de los peruanos
Por: Ing. Miguel Cardozo, vicepresidente del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú
Esta semana quiero referirme a un artículo del economista Carlos Ganoza Durand publicado el domingo último en El Comercio bajo el título de “La espantosa receta peruana de desarrollo”, en el que trata sobre el PBI per Cápita que podría alcanzar el Perú en función de su tasa de crecimiento.
Dicho artículo tiene como fuentes un estudio de los profesores de Stanford Robert Hall y Charles Jones, y un subsecuente estudio del premio Nobel de Economía Michel Spence, por encargo del Banco Mundial.
En ellos se determina que los países requieren cinco elementos básicos para lograr un crecimiento acelerado y sostenido, a saber, sacar provecho de la economía global, mantener estabilidad macroeconómica, tener altas tasas de inversión, aprovechar el mercado como asignador de recursos, elevar sus tasas de productividad y tener gobiernos comprometidos, creíbles y capaces.
Ganoza presenta, además, una infografía muy didáctica que resume el número de años que requeriría el Perú para alcanzar el PBI per Cápita de España y Chile con un crecimiento a tasas anuales entre 2% y 6%.
Por ejemplo, si el Perú creciera a un 2% anual, nos tomaría 58 años para alcanzar el PBI per Cápita de España y 32 años para alcanzar a Chile. En el otro extremo, si crecemos al 6%, requeriríamos 20 y 11 años, respectivamente, para alcanzar a estos países. Ganoza concluye, con toda razón, que “seguir en el camino donde estamos [actualmente] implica que las generaciones futuras estarán peor en términos relativos que nosotros”.
En el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú, en colaboración con el Centro para la Competitividad y el Desarrollo, hicimos en el 2019, un estudio sobre el impacto de la minería en la macro- y microeconomía del Perú, y tocamos, entre otros, estos temas de la expansión económica y del crecimiento del PBI per Cápita, llegando a conclusiones similares y demostrando que si desarrollamos la cartera de proyectos mineros de manera competitiva y responsable, sin conflictos ni demoras, podríamos alcanzar tasas de crecimiento de 6% y hasta de 8% si impulsamos el desarrollo de otros sectores económicos.
Lograr un Perú próspero y más justo es tarea de todos los peruanos. El consenso es una tarea insoslayable. Rechacemos la corrupción, la mediocridad, la desigualdad y la inestabilidad. No esperemos justicia social sin políticas inclusivas y sin un Estado eficiente y honesto, pero tampoco esperemos reducción de la pobreza, ni servicios de calidad en salud y educación, sin un crecimiento económico sostenido y diversificado.