Comités de Autodefensa: Ley Inconstitucional
Como mencioné en un comentario previo, el Congreso peruano ha aprobado una norma que -de ser aplicada- hará más fácil para el gobierno la constitución de organizaciones paramilitares. Pero la norma no solo está mal por el contexto en el que extiende atribuciones a los CAD, sino que es inconstitucional.
Los estados modernos reconocen el principio de “monopolio del uso de la fuerza” por parte del Estado. De acuerdo a este principio, solo el Estado puede ejercer violencia para mantener el orden interno (hacer cumplir las normas). Este principio tiene excepciones, pero las excepciones deben ser muy acotadas y deben estar plenamente justificadas.
Justamente, el DL 741 de 1991 se dictó en un contexto excepcional, de lucha contra el terrorismo y fue muy acotado. Los CAD solo podían ayudar a la policía y las FF.AA. en la lucha contra el narco-terrorismo.
Por el contrario, la Ley 31494 establece que los CAD pueden ayudar a mantener el “orden interno”. De acuerdo a nuestra Constitución, esa tarea le corresponde a la policía (artículo 166) y solo excepcionalmente puede delegarse a las FF.AA. (estado de excepción, artículo 137).
Como vemos, la Constitución es clara sobre quién debe mantener el orden interno. En ningún caso se menciona que podría utilizarse a fuerzas paramilitares, distintas a la policía o las FF.AA. De esta forma, se demuestra que nuestra constitución acoge el mencionado principio.
¿Este principio podría flexibilizarse al punto de admitir CAD? No como lo ha planteado el Congreso. Algo similar a un CAD podría existir sí el contexto lo exigiera como en 1991 y de una forma mucho más acotada. En este caso, el contexto nos exige todo lo contrario, al tener en el poder a un grupo ligado al narco-terrorismo. Además, la norma actual, a pesar de no tener justificación, ha sido mucha más pródiga en atribuciones y recursos para los CAD que lo que fue el DL 741, a pesar de que en su caso sí se justificaba contar con CAD.
En definitiva, el Congreso, o ha cometido una patinada épica que debería corregir; o, es cómplice de este gobierno.