Redes Sociales: No son una varita mágica, ni tampoco una estrategia
Una aplicación social (fan page) correctamente gestionada permite fortalecer el posicionamiento, lanzar nuevos productos y promociones, atender consultas, instruir a los clientes en el uso de nuestros servicios, solicitar retroalimentación, generar registros para luego vender, entre otros.
Sin embargo, las redes sociales no son varitas mágicas que por sí solas permiten lograr los objetivos de negocio. Un paso previo indispensable es contar con un producto o servicio de calidad con un posicionamiento único y relevante para un grupo objetivo claramente definido. Sobre esta base sólida, recién será posible implementar iniciativas efectivas en las redes.
Una aplicación en redes sociales no compensará debilidades significativas en el marketing mix de una marca. Por el contrario, la dinámica de las redes hará aún más evidentes las falencias a nivel de producto o servicio. Asimismo, los esfuerzos que se dediquen a administrar la aplicación social serán más bien un distractor, que evitará que la empresa se concentre en temas más críticos que la afectan en esos momentos.
¿Entonces no puede beneficiarse de las redes sociales, una empresa que no ha resuelto todas las variables de su marketing mix? No, ya que un fan page no es un requisito indispensable. Una empresa puede monitorear las redes para identificar las tendencias en su rubro, las necesidades de los consumidores, las iniciativas de la competencia, los comentarios sobre su marca y en base a esta información tomar acciones.
Por otro lado, una aplicación en las redes sociales no es una “estrategia”, más bien es un nuevo canal que facilita la ejecución de la estrategia de la empresa.
Por ejemplo, en el caso de un banco, su aplicación en redes sociales equivale a sus agencias, página web o banca telefónica. Si el banco busca ofrecer el servicio más ágil y conveniente, su aplicación en la red social le permitirá atender de manera eficiente y más rápida a sus clientes, incrementando su satisfacción. Este el caso de Interbank.
Cabe notar, que si un empresa no integra sus esfuerzos en redes sociales con su estrategia de negocio, los primeros acabarán siendo vistos como gastos que no suman valor y por lo tanto serán recortados o eliminados.
En resumen, asegurémonos de construir nuestra presencia en redes sociales sobre productos y servicios con desempeños y estrategias sólidas. Asimismo, enfoquemos nuestra aplicación como un canal, que correctamente gestionado, nos permitirá ejecutar la estrategia de negocio.