El smartphone que soporta una moto y aún quiere jugar contigo

Hace unos días asistí a una fiesta tecnológica organizada por OPPO. No fue una presentación tradicional. Fue una celebración, una experiencia, un recordatorio de que ya tengo 40 años y que hay una nueva generación de comunicadores con otros gustos, otras formas de contar, otras formas de vivir la tecnología.
En medio de luces, música y conversaciones cruzadas, conocí el nuevo OPPO A6 Pro 5G. Un smartphone que no solo presume batería de 6,500 mAh y carga de 80 W, sino que se atreve a decir: “soy resistente y puedo demostrarlo”.
Lo tiré al suelo. Literalmente. Y no pasó nada. Pero la prueba definitiva llegó cuando le pasaron por encima una moto Honda estilo enduro. 210 kilos de presión sobre el equipo. Y el OPPO A6 Pro ni se inmutó.
Más allá del show, lo que me interesa es lo que representa: una apuesta por la durabilidad sin sacrificar diseño. Un equipo con certificación IP69, pantalla AMOLED de 6.7” a 120 Hz, conectividad 5G optimizada para gaming, y un diseño que no busca parecer robusto, sino elegante.
Y sí, también pensé en los gamers. Porque el A6 Pro 5G integra AI LinkBoost 3.0, que prioriza automáticamente el tráfico de juegos para reducir la latencia. Su antena inteligente AI Game Antenna mejora la recepción de señal en modo horizontal, justo donde más se necesita. La batería permite sesiones largas sin interrupciones, y la pantalla de 120 Hz con 1,400 nits de brillo asegura que incluso bajo el sol, la experiencia visual se mantenga fluida y nítida.
En un mundo donde los smartphones se renuevan cada seis meses, OPPO propone algo distinto: que la resistencia también puede ser parte del estilo. Que la tecnología puede acompañar sin romperse. Que incluso en una fiesta, hay espacio para contar historias con propósito y para jugar sin miedo.