Energía verde ¿seria una buena inversión?
¿Sabia usted que en 2017 se rompieron records del consumo de energía renovable en todo el mundo?
En Costa Rica, por ejemplo, la energía renovable abasteció a cinco millones de personas con todas sus necesidades de electricidad durante un tramo de 300 días consecutivos. Mientras tanto, el Reino Unido rompió 13 récords de energía verde solo en 2017, y el operador de red más grande de California en USA anunció que obtuvo el 67.2% de su energía de fuentes renovables (excluyendo la hidráulica) el 13 de mayo de 2017.
El mundo empresarial también se ve prometedor, y Google ha liderado el camino comprando 536 MW de energía eólica para compensar el 100% del uso de electricidad de la compañía. Esto hace que el gigante tecnológico sea el mayor comprador corporativo de energía renovable en el planeta.
Pero aunque estos ejemplos son abundantes, este progreso es solo la punta del iceberg, y la energía verde aún representa un segmento pequeño pero de rápido crecimiento. Para que ocurra un cambio verde completo, necesitaremos 10 veces más de lo que estamos obteniendo de fuentes renovables. Para hacer esto, necesitaremos obtener cantidades masivas de recursos naturales, simplemente no serán los combustibles fósiles a los que estamos acostumbrados.
Hace poco se realizó en Canadá “Vancouver Resource Investment Conference 2018″, donde el tema principal de la conferencia era la energía sostenible, y las matemáticas de hecho dejan en claro que para una transición total a una economía verde, necesitaremos grandes cantidades de metales como cobre, silicio, aluminio, litio, cobalto, tierras raras y plata. .
Estos metales y minerales son necesarios para generar, almacenar y distribuir energía verde. Sin ellos, la realidad es que tecnologías como paneles solares, turbinas de viento, baterías de iones de litio, reactores nucleares y vehículos eléctricos simplemente no son posibles.
¿Cómo se hace para que un automóvil Tesla conduzca más de 480 km con solo una carga?
Esto es lo que necesita: un cuerpo liviano, un potente motor eléctrico, una batería de vanguardia que puede almacenar energía de manera eficiente y una gran cantidad de destreza en ingeniería.
Dejando a un lado la ingeniería, todas estas cosas necesitan metales especiales para funcionar. Para el cuerpo liviano, el aluminio se sustituye por acero. Para el motor eléctrico, Tesla está utilizando motores de inducción de CA (modelos S y X) que requieren grandes cantidades de cobre y aluminio. Mientras tanto, Chevy Bolts y pronto Tesla usarán motores de imán permanente (en el Modelo 3 ) que usan tierras raras como el neodimio, el disprosio y el praseodimio.
Las baterías, son un desafío completamente diferente de la cadena de suministro. Las baterías de iones de litio que se usan en los vehículos eléctricos necesitan litio, níquel, cobalto, grafito y muchos otros metales o minerales para funcionar. Por cierto, cada batería de Tesla pesa alrededor de 540 kg y constituye el 25% de la masa total del automóvil.
Se aplican los mismos principios para paneles solares, turbinas eólicas, reactores nucleares, soluciones de almacenamiento de energía a escala de red o cualquier otra cosa que necesitemos para asegurar un futuro sostenible. Los paneles solares necesitan silicio y plata, mientras que las turbinas eólicas necesitan tierras raras, acero y aluminio. Por tanto, si el cambio a energía verde se sigue dando paulatinamente la demanda de estos metales también aumentará.
La Energía Solar
La capacidad de energía solar fotovoltaica creció un 50% el año pasado convirtiéndose en la fuente de energía que más rápido creció, superando incluso al carbón. Según el informe anual de la Agencia Internacional de Energía, China, fue el gran motor de esta expansión aportando la mitad de la expansión.
Las cifras reveladas por la agencia indican que las nuevas redes energéticas que crecen en el mundo son mayoritariamente renovables. Se estima que dos tercios de la nueva capacidad neta, 165 gigavatios (GW), corresponden a energía limpia. Los pronósticos apuntan a que la tendencia continuará en 2018 y para 2022, la capacidad de electricidad renovable debería aumentar en un 43%.
Viendo el crecimiento actual y lo que se pronostica ¿invertiría usted en el mercado de energía renovable?
Si este nicho de mercado le parece interesante y no tiene en mente alguna empresa en especifico, puede invertir en esta tendencia a través de un ETF. Por ejemplo, el ETF VanEck Vectors Global Alternative Energy GEX, el fondo invierte al menos el 80% de sus activos totales en acciones de empresas dedicadas principalmente al negocio de la energía alternativa. Dichas empresas pueden incluir compañías de pequeña y mediana capitalización, cuya principal actividad se lleva a cabo a través de fuentes respetuosas con el medio ambiente y no tradicionales.
En el gráfico se puede apreciar el comportamiento del ETF GEX en los últimos 2 años, nada mal, si la tendencia mundial sigue siendo hacia la “energía verde” este ETF vera buenos recorridos en los próximos años.
Para los lectores que se encuentran buscando opciones de inversión para el 2018, hemos preparado un ebook de descarga gratuita “7 Empresas estupendas para invertir en 2018”. Pueden descargarlo desde este link: http://growthtrading.net/ebook-7-empresas-para-invertir-2018
Y para los lectores que buscan capacitación y formación, pueden visitar este link: http://tutores-fx.com/lp/curso-personalizado-forex-acciones-diego-ruiz-d/