El indicador BBVA de consumo, que utiliza información de los montos de compras con tarjetas de crédito y débito que realizan las familias y los retiros de dinero a través de
cajeros y ventanilla, aumentó 18.3% en octubre respecto a similar mes del 2020. Es decir, perdió velocidad comparado con los meses previos (cuando creció más de 30%).
En la misma línea, cuando se compara con el nivel precovid, este indicador se incrementó 15% el mes pasado, mostrando que “el gasto de familias se desaceleró en octubre”, según el BBVA Research.
“Es una consecuencia de que poco a poco los fuertes efectos que generan los rebotes, la recuperación de gasto contenido y la demanda contenido durante la época del confinamiento, vayan perdiendo impulso y empuje. También ha perdido fuerza la recuperación del mercado laboral, por eso vamos a ver una suerte de normalización en el gasto de las familias”, comentó Hugo Perea, economista jefe del BBVA Research.
Agregó que parte del fuerte impulso visto inicialmente en el gasto de las familias se explicó a que se pudo contener mejor la pandemia, y a que las personas han contado con liquidez (en parte, por retiros de AFP y CTS), lo que dio aporte al consumo. Pero, “seguramente vamos a ver que estos ahorros privados disminuyen y la capacidad de gasto no es igual (...) en general lo que uno vería es una moderación hacia adelante”, anotó.
-Consumo con tarjeta-
A pesar de la desaceleración, el gasto de los hogares con tarjetas mantiene un buen ritmo. Las compras con tarjetas de crédito o débito crecieron 72% con respecto a octubre de 2019, mientras que los retiros de dinero se redujeron en 3%.
Por ejemplo, el gasto con tarjeta en alimentos, salud, y bienes y servicios para el hogar continúan mostrando una fuerte expansión (aunque, en octubre, los gastos en farmacias y boticas continuaron desacelerando su ritmo de crecimiento). Esto responde, en parte, a que se tratan de productos de primera necesidad, y el gasto en ellos no se redujo, incluso, durante el confinamiento del año pasado.
En tanto, la flexibilización de medidas de aislamiento ha favorecido la recuperación del gasto con tarjeta en transporte, restaurantes y moda así como en alojamiento y servicios vinculados al turismo (pasajes y excursiones).
Es más, cuando se ve la participación de los gastos relacionados con viajes (pasajes y tours) -respecto al total de gastos con tarjeta- se obtiene que tuvo un ligero aumento comparado con el mes previo: pasó de 9% a 11%, acercándose al 13% registrado a fines del 2019 (ver En corto).
Y, los gastos en servicios de entretenimiento, bares y salones de belleza también tienden a mejorar, aunque todavía siguen rezagados.
-Compras online-
En octubre, el 40% de las compras con tarjetas se realizó de manera online. Este porcentaje es ligeramente mayor al registrado en setiembre (39%).
Hay que recordar que antes de la pandemia, solo el 20% se hacía por este canal. Es más, en diciembre del 2019, la participación de las compras por canal online respecto de las compras totales con tarjeta fue de 18%.
-Generación de empleo-
Perea mencionó que lo ideal sería que el empleo y el consumo se recuperen principalmente por un impulso a la inversión privada, más que por medidas transitorias como un bono.
“Para eso tiene que haber un mejor entorno para los negocios, emprendimientos, un entorno de confianza”, dijo.