Redacción Gestión

redaccion@gestion.pe

(Bloomberg).- Un peligro mayor que los relojes inteligentes es que directamente no haya relojes, según el presidente de Omega, Stephen Urquhart.

El fabricante de relojes de lujo –algunos vinculados a la franquicia de las películas de James Bond- que vende por un promedio superior a los US$ 6,000 está tratando de atraer a los consumidores más jóvenes. Más de la mitad de los que tienen entre 16 y 34 años usan el teléfono móvil como su principal forma de saber la hora, según una encuesta YouGov.

"Para mí, es un reto mayor que los relojes inteligentes: garantizar que lleguemos a ellos con un producto que tiene la imagen de ser el tipo de mundo de sus padres", dijo Urquhart en una entrevista en Zúrich.

Los fabricantes de relojes suizos enfrentan una lista cada vez mayor de desafíos: medidas enérgicas contra el gasto extravagante en China que ya llevan tres años, el avance del franco suizo y la competencia del reloj inteligente recién llegado de Apple Inc.

Atraer clientes más jóvenes constituye un elemento clave de la estrategia de la empresa, que es propiedad de Swatch Group AG. Las exportaciones de relojes suizos cayeron 7.2% en el tercer trimestre, su mayor declinación desde 2009, mostraron datos federales de aduana este martes.

El fabricante de relojes seleccionó a Eddie Redmayne, un actor del Reino Unido de 33 años ganador de un Oscar, como embajador de la marca en mayo para sumarse a George Clooney, que tiene 54, y a Nicole Kidman, de 48 años. La afiliación de Omega con la franquicia James Bond, para la cual está vendiendo este años dos ediciones limitadas, también ayuda dado que el agente 007 es atractivo para los 'millennials' pese a que la franquicia tiene seis décadas, dijo Urquhart.

Cronometrador oficial.Omega no ha cerrado la puerta a la idea de agregar funciones electrónicas a sus relojes, posiblemente en modelos ligados a Bond o a los Juegos Olímpicos, de los que es cronometrador oficial, dijo Urquhart. En las películas de espionaje, los relojes de la marca exhiben artilugios como ganchos y percutores detonadores.

"La población está envejeciendo, pero no es ese el consumidor que buscamos, ya lo hemos cubierto", dijo en una entrevista el 14 de octubre Urquhart, de 69 años. "Cambiar la mentalidad de alguien a los 70 u 80 años es más difícil. Si les gustan los relojes, les gustan los relojes. En caso contrario, no sé si es algo que podamos cambiar".

En ese sentido, Asia es un mercado estratégico ya que allí los compradores tienden a ser más jóvenes, a menudo entre 25 y 45 años, y el fabricante de relojes quiere tratar de encontrar clientes fieles en ese grupo etario. La Gran China es el mayor mercado de importación para los relojes suizos, recibiendo un cuarto de los relojes que produce Suiza.

Omega está sacando a la venta más de 140 millones de francos suizos (US$ 146 millones) de relojes James Bond este año, sobre la base de la cantidad vendida y su precio minorista recomendado. La compañía con sede en Biel, Suiza, presentó un Seamaster Aqua Terra por 6,600 francos suizos en marzo y comenzó a vender un Seamaster 300 por 6,800 francos el mes pasado, ambas ediciones limitadas vinculadas a la franquicia 007.

Omega ha aparecido en las películas de James Bond desde que Pierce Brosnan usó el Seamaster Diver 300 en la película de 1995 "GoldenEye", eliminando a otras marcas como Rolex, Seiko y Breitling, que aparecían en películas anteriores. "Spectre", la vigésimo cuarta película de Bond, se estrenará en los cines del Reino Unido el 26 de octubre, y sigue a "Skyfall", que recaudó más de US$ 1,000 millones.

Las ventas de Omega alcanzaron 2,300 millones de francos en 2014, más de un cuarto de la facturación total de Swatch Group, según estimaciones de Alessandro Migliorini, analista en Mirabaud Securities LLP. Los analistas prevén que las ventas de Swatch Group, cuyos productos incluyen relojes Swatch por US$ 50 y Breguet de seis dígitos, crecerán 1 por ciento este año, el nivel más bajo desde la crisis financiera.

TAGS RELACIONADOS