Follett nos tiene acostumbrados al buen engaño. En sus dos exitosas trilogías, “Los Pilares de la Tierra” y “La Trilogía del siglo”, el autor hace un trabajo de investigación tan exhaustivo, que uno olvida que está leyendo una novela de ficción histórica, para asumir, por momentos, que lo ficticio es real. Valerse de referencias a hechos y personajes existentes es su mejor herramienta para reforzar el compromiso del lector.
En “Nunca”, su última entrega, Follett usa la misma estrategia y nos presenta un relato muy bien documentado acerca de la realidad geopolítica actual y sus actores principales. Pero en esta oportunidad, el autor nos sorprende con una historia que se desarrolla en nuestro tiempo presente. Abandona la novela histórica para acercarnos a un plano de la realidad actual.
Como en sus novelas anteriores, utiliza historias paralelas que se van encontrando a medida que la trama se va elaborando. Logra trenzarlas a pesar de desarrollarse a miles de kilómetros las unas de las otras. Una de ellas se ubica en el centro mundial del poder político y militar: la Casa Blanca. La segunda, en el desierto del Sahara en torno a los movimientos islamistas radicales; y la tercera, en los círculos de poder del gobierno de la República Popular de China. Todos los personajes involucrados son concebidos de manera impecable y son dueños de historias tan particulares como verosímiles, igual que la realidad en la que están inscritos. La calidad descriptiva y la fluidez del texto consiguen que el lector más que leer el relato, lo vea.
El tema central de la novela es el riesgo inminente de una guerra nuclear, “esa guerra que nadie quiere”, como bien lo señala Follett. A medida que avanzamos en la lectura, vamos tomando conciencia de ese peligro que vive entre nosotros, un peligro que a pesar de creerlo lejano puede alcanzarnos en cualquier momento. Nos enfrenta a aquellos que toman las decisiones en el juego del poder, mostrándolos como seres falibles. El cuestionamiento sobre los mecanismos con los que les otorgamos el poder es inevitable y bastante incómodo.
El lector de “Nunca” puede disfrutar la novela como si estuviera viendo una película de acción e intriga o puede, como en mi caso, quedarse con más preguntas que respuestas acerca del destino de la humanidad. Como si no tuviera yo suficientes interrogantes.
Claves
- Ken Follett escribió once novelas poco exitosas hasta que en 1978 alcanzó el éxito comercial con “El ojo de la aguja”. A partir de ese momento sus novelas se han traducido a 40 idiomas y a la fecha, sus 36 libros han vendido alrededor de 181 millones de ejemplares en más de 80 países.
- Varias de sus novelas han sido llevadas a la televisión y al cine, e incluso “Los Pilares de la Tierra” ha sido adaptada como videojuego.
- Follett considera que el éxito de sus novelas se explica por su disciplina obsesiva por investigar y planear antes de empezar a escribir.
- Además de participar activamente de diversas obras de caridad, el autor es un guitarrista aficionado.
Sobre el autor
Felipe Ossio Guiulfo es empresario gastronómico y alumno de Rock the Bubble, escuela de escritura creativa.