Redacción Gestión

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El gas de Camisea se fue abriendo camino en el mercado peruano con el paso de los años, a pesar de que en un principio nadie lo quería: ni las cementeras ni las industrias. Sin embargo, fue ganando espacio, y con el ducto comenzó a haber usuarios industriales que luego se extendieron hasta la industria automovolística. Así describe Pedro Pablo Kuczynski (PPK) el emergente uso del gas natural, cuya demanda en estos sectores definió, en parte, la decisión del gobierno para generar un polo petroquímico.

En su , PPK resalta la pertinencia de esta decisión, pero advierte que aún falta generar más demanda que termine beneficiando a todos los peruanos.

¿Cómo lograrlo? PPK propone que se busquen consumidores de energía en cantidades importantes, como las compañías mineras. Esta demanda justificará las inversiones orientadas a los usuarios más pequeños, lo cual promoverá el uso del gas en el camino del ducto hacia los departamentos de Cusco, Puno y Arequipa.

"Si llevamos el gas al sur del país sería muy beneficioso. Lo que sucede es que en Lima somos 9 millones de habitantes y en el sur son mucho menos. Por ello, es necesario también crear un polo petroquímico en el sur, ya sea en Marcona o Ilo", precisó.

Considerando que Jorge Merino, ministro de Energía y Minas, confirmó que hay reservas suficientes equivalentes a tres Camiseas más, "debe haber usuarios para dicho gas, porque de lo contrario no nos será de utilidad tener tantas reservas", explicó.

Por otro lado, PPK señaló que es necesario atenuar el ruido político alrededor de este proyecto. Como ejemplo puso a Bolivia, país donde las reservas de gas han caído considerablemente como resultado del ruido político y de la falta de exploración. El uso de este recurso "debe tener un complemento en la sensatez de los gobernantes para darle un uso adecuado que favorezca al mayor número posible de peruanos", puntualizó.