La Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) ha hecho algo por primera vez. Casi diez años después de que el tratado de libre comercio entre Estados Unidos y Perú entró en vigor el 1 de febrero del 2009, la USTR solicitó, y recientemente celebró, "consultas ambientales" con el Gobierno peruano.
¿La razón? En diciembre, el Perú trasladó a la agencia de inspección forestal Osinfor, pionera, efectiva e internacionalmente respetada, de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) al Ministerio del Ambiente, despojándola de su independencia y comprometiendo seriamente su capacidad para exponerla tala ilegal de madera y otros delitos forestales en la región amazónica y otros lugares.
Se podría decir que esa decisión viola el TLC cuyo anexo sobre gobernanza del sector forestal establece explícitamente que "Osinfor será una agencia independiente y separada", como se pretendía inicialmente en el año 2000, cuando comenzó a implantarse un nuevo régimen legal sobre bosques en Perú. Fue precisamente este compromiso lo que llevó a Osinfor en junio del 2008 a ser efectivamente "reencarnado" y ser independiente de cualquier ministerio.
La declaración de la USTR que anunciaba su solicitud de consultas con Perú afirmaba que se trata de un paso "sin precedentes" y una clara señal de que la administración Trump "toma en serio el monitoreo y la aplicación de los acuerdos comerciales de EE. UU., incluidas las obligaciones de fortalecer la gobernanza del sector forestal".
El representante comercial Robert Lighthizer dijo que “Osinfor ha desempeñado un papel fundamental en la detección y combate de la tala ilegal, y nos preocupa gravemente que su independencia esté amenazada. Insto a Perú a cumplir con sus obligaciones y restablecer la separación e independencia de Osinfor, tal como se exige en el Acuerdo de Promoción Comercial".
Sin duda, hay otros motivos, pero aquí les presento 10 razones por las que creo que Estados Unidos debe insistir en que Perú respete el TLC bilateral, restableciendo la independencia de Osinfor ante cualquier ministerio.
1. La gran mayoría de la madera peruana se extrae ilegalmente, aunque esa madera pueda parecer legal más adelante en la cadena de suministro cuando viene acompañada por el papeleo requerido, pero falsificado. Esto ha sido informado una y otra vez durante muchos años por numerosas instituciones, entre ellas el Banco Mundial, la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, la Organización Internacional de Maderas Tropicales, el Centro para la Investigación Forestal Internacional, la Agencia de Investigación Ambiental, Global Witness y Al- Jazeera, así como la propia Osinfor.
Las estimaciones de los porcentajes de madera ilegal han alcanzado el 90%. En un reciente artículo del New York Times que instaba a Estados Unidos a "poner mano dura en el tema maderero con Perú", la tala ilegal se describió como "casi irremediablemente rampante".
2. A pesar de los esfuerzos de otras instituciones, es Osinfor quien ha tomado la iniciativa, con mayor rigor, regularidad y persistencia, al exponer el alcance de la tala ilegal en Perú. Lo ha hecho al realizar miles de inspecciones en el área de extracción para verificar si realmente se obtuvo la madera de donde los madereros, los propietarios de tierras, los aserraderos, los exportadores y otros afirman. De acuerdo con Osinfor a mediados del 2018, el 67% de la madera de las áreas de extracción inspeccionadas en el 2016 y 2017 fue "no autorizada", por debajo de un alto nivel anterior del 89%.
3. Fue la independencia de Osinfor bajo la Presidencia del Consejo de Ministros lo que le permitió operar de manera tan efectiva. Antes del 2008, la agencia estaba dentro del Ministerio de Agricultura, donde era en gran parte inútil. Fue solo después de su "reencarnación" en junio del 2008, tras el compromiso hecho en el TLC con Estados Unidos, que comenzó a realizar inspecciones regulares del área de cosecha y exponer las ilegalidades generalizadas.
4. Estados Unidos ha estado importando madera ilegal de Perú durante muchos años, a pesar del objetivo declarado del TLC de contribuir a los "altos niveles de protección ambiental" y la Enmienda de la Ley Lacey en el 2008 que prohíbe el ingreso al país de madera ilegal y otros productos, como plantas, pescado y vida silvestre. Si Osinfor continúa dentro del Ministerio del Ambiente, probablemente será mucho más difícil detener las futuras importaciones ilegales de madera hacia Estados Unidos.
5. A pesar de esta situación lamentable, Estados Unidos no ha tomado casi ninguna medida concreta a lo largo de los años para detener la importación de madera ilegal desde el Perú. Las raras excepciones incluyen el bloqueo del ahora famoso barco Yacu Kallpa en Houston en setiembre del 2015, y una solicitud al Gobierno peruano para verificar la legalidad de un envío anterior de Yacu Kallpa que llevó a una empresa peruana, Inversiones La Oroza, a ser suspendida de exportar a Estados Unidos por tres años. Ambas acciones solo fueron posibles gracias a un Osinfor independiente. Nuevamente, si la agencia continúa dentro del Ministerio de Medio Ambiente, probablemente será aún más difícil para los EE.UU. tomar medidas similares en el futuro.
6. Estados Unidos es uno de los tres principales destinos de exportación para la madera peruana, junto con China y México, los cuales posteriormente reexportan productos de madera también a Estados Unidos. Si bien se informa que las cantidades exportadas son pequeñas en comparación con las que se consumen en el país, es claro, por lo tanto, que Estados Unidos es el principal responsable en ayudar a garantizar que la madera peruana se extraiga legalmente. Con Osinfor dentro del Ministerio del Ambiente, es probable que en el futuro EE.UU. importe aún más madera peruana ilegal.
7. En los últimos años, EE.UU. ha proporcionado más de US$ 90 millones en “asistencia técnica y desarrollo de capacidades” para mejorar la gobernanza del sector forestal en Perú, según Michael Froman, el predecesor de Robert Lighthizer como Representante Comercial de EE.UU. Agencias como USAID y el Servicio Forestal de Estados Unidos han participado y se han iniciado una serie de proyectos para brindar esa asistencia. El hecho de no insistir en un Osinfor independiente de acuerdo con el TLC socava, o incluso se burla, de otras iniciativas de Estados Unidos que involucran al sector forestal peruano.
8. Si no lo hace Estados Unidos, ¿entonces quién? Ni China ni México tienen acuerdos comerciales con Perú que estipulen la independencia de Osinfor. De hecho, ni China ni México tienen legislación nacional que prohíba las importaciones ilegales de madera.
9. El mandato de Osinfor es "supervisar y monitorear" la "explotación y conservación de los recursos forestales y de vida silvestre", entre otras cosas, lo que significa supervisar y monitorear numerosas cuestiones de las que es responsable el Ministerio del Ambiente. Pero, ¿cómo puede Osinfor estar dentro del ministerio y, en parte, supervisarlo al mismo tiempo? Según la Agencia de Investigación Ambiental y otras ONG, colocar a Osinfor dentro del ministerio "genera un claro conflicto de intereses".
10. La Amazonía peruana es, casi sin necesidad de decirlo, un lugar verdaderamente sorprendente. Comprende el cuarto bosque tropical más grande del planeta, cuenta con una biodiversidad extraordinaria y tiene una población de al menos 3.5 millones de personas, incluidos más de 60 pueblos indígenas.
La tala ilegal allí no solo fomenta la deforestación insostenible y la degradación de los bosques, sino también el acaparamiento de tierras y el tráfico de tierras, corrupción, explotación, servidumbre por deudas, prostitución, conflictos sociales, violencia, asesinatos, lavado de dinero, crimen organizado, comercio de cocaína y la invasión de reservas existentes - o propuestas - habitadas por indígenas que viven en "aislamiento".
Al exponer el comercio ilegal de madera durante todos estos años, Osinfor, independiente de cualquier ministerio, podría haber estado luchando contra todos esos delitos, abusos y horrores. Su independencia es esencial: para Perú, para la Amazonía, para el clima global y para los consumidores y gobiernos en países como Estados Unidos.
Dato
David Hill es un periodista independiente que se centra en América Latina, los derechos humanos y el medio ambiente.