José Luna Morales renunció a la presidencia de la Comisión de Defensa del Consumidor

El congresista José Luna Morales (Podemos Perú) renunció este lunes a la presidencia de la Comisión de Defensa del Consumidor del Parlamento. Durante la sesión de dicho grupo de trabajo, el legislador dijo sentirse “orgulloso” por su gestión y explicó que su dimisión se debe a “un tema de compromiso político asumido” con su bancada.

“Por un tema de compromiso político asumido con mi bancada, presento en este momento mi renuncia al cargo de presidente de esta comisión”, afirmó el legislador en su intervención.

“Me he sentido muy orgulloso de ser parte de este grupo que ha defendido y seguirá defendiendo a los consumidores del país y, sobre todo, a los de menos recursos”, añadió.

En esa línea, Luna Morales destacó los supuestos “logros” de la Comisión de Defensa del Consumidor durante su cargo y aseveró que este grupo “ha hecho un trabajo que durante muchos años había estado oculto a favor de los ciudadanos”.

“Considero que hemos cumplido con el mandato constitucional de ejercer la labor parlamentaria de control político a través de la fiscalización y la representación a los consumidores peruanos”, señaló.

“Las leyes aprobadas tienen una trascendencia importante en la vida de los consumidores. Creo que hemos cumplido el rol que nos dio la población al elegirnos y esta comisión ha hecho el trabajo que durante muchos años había estado oculto, quizás, para los consumidores de nuestro país”, añadió.

Finalmente, Luna cedió la palabra a Rolando Campos (Acción Popular) “por ser el congresista de mayor edad presente” en la sesión y dio a conocer que la Comisión de Defensa del Consumidor será presidida por su colega de bancada Johan Flores Villegas.

Durante la gestión de Luna Morales, la referida comisión aprobó diversos dictámenes y proyectos de ley, como la devolución de aportes de la ONP, cuya constitucionalidad ha sido demandada por el Ejecutivo ante el Tribunal Constitucional. Asimismo, en las últimas semanas, aprobó un dictamen para fijar un tope en las tasas de interés ofrecidas en el sistema bancario, el cual está pendiente de ser debatido en el pleno.