El expresidente, Alberto Fujimori, fue dado de alta este lunes, tras sufrir problemas de salud el último sábado, por lo que fue hospitalizado en una clínica local.
"Luego de haber sido estabilizado en los problemas de salud presentados el sábado último, me han dado de alta. Agradezco al personal de la Clínica por las atenciones recibidas y a todos los amigos por su preocupación", dijo el exmandatario a través de su cuenta de twitter.
A reglón seguido pidió "mesura" y "responsabilidad" ante el panorama - según advirtió - de inestabilidad ante las declaraciones del exgerente de Odebrecht, que involucran también a su hija, Keiko Fujimori, en la recepción de dinero para la campaña presidencial del 2011.
"A pesar de que la salud no siempre me acompaña, no soy ajeno a la sensación de inestabilidad que vive el país. Lo mejor sería que prime la mesura y una actitud responsable que genere un clima de tranquilidad y reflexión para bien de todos los peruanos", señaló.