Papa Francisco llega a un Perú entusiasmado pero dividido por heridas del pasado

El Papa Francisco llegó a Perú, uno de los países más católicos de Latinoamérica, donde está previsto que brinde un mensaje de unidad después de que una crisis política reabriera viejas heridas de una época de abusos a los derechos humanos.

El Sumo Pontífice fue recibido en una base de la Fuerza Aérea de Lima por el presidente Pedro Pablo Kuczynski y líderes de la Iglesia Católica. Ninguno de los dos hizo declaraciones, pero Kuczynski había llamado antes a los peruanos a escuchar a Francisco en pos de la unidad del país.

"Será un privilegio acompañarlo en Lima, Puerto Maldonado y Trujillo, para escuchar su mensaje a favor de la paz, el diálogo y el entendimiento", afirmó el mandatario peruano sobre la visita del Papa, que concluirá el domingo.

Poco después de su llegada desde el puerto chileno de Iquique, el primer Papa latinoamericano partió en un pequeño Fiat negro hacia el monumento de la Virgen del Inmaculado Corazón de María, ubicado en un distrito limeño frente al Pacífico, donde cambió de vehículo a un papa móvil.

En el camino, el Pontífice sacó su brazo por la ventanilla para saludar a los entusiasmados fieles parados en el camino que gritaban de emoción. En un punto, algunas personas incluso se acercaron al auto, saltando las vallas de seguridad.

"El día de hoy ha llegado. Estamos contentos de manera especial, el Papa significa para mí mucho y estoy con muchas ansias de escuchar cada uno de sus discursos y sus enseñanzas", dijo Ronald Serrano, un profesor de 29 años en una avenida donde algunos fieles cantaban temas alusivos a la paz.

Francisco recorrió con el papa móvil una de las principales avenidas de Lima, donde lo esperaban desde la mañana familias enteras, muchas con camisetas de color blanco y amarillo, que agitaban globos y pañuelos y lo saludaban con gritos y vivas.

Antes de ingresar a la Nunciatura Apostólica de Lima, el Papa bajó del vehículo para estrechar la mano a algunos fieles, mientras jóvenes danzaban un baile típico del norte de Perú.

"Gracias por haber venido hasta aquí, gracias de corazón. Ahora quisiera darle a todos ustedes, a sus familias, a los que tienen en el corazón, la bendición", dijo el Papa, antes de invitar a la multitud a rezar juntos a la Virgen María.

Polarización
El Papa visita un Perú dividido, luego de que Kuczynski otorgara en vísperas de la Navidad un indulto al exmandatario Alberto Fujimori, de 79 años, que cumplía prisión por su responsabilidad en la matanza de 25 personas, entre ellas un niño, durante su mandato entre 1990 y el 2000.

El indulto a Fujimori, que combatió con mano dura una insurgencia liderada por un grupo maoísta durante su gobierno populista de derecha, desató protestas de los familiares de las víctimas y de organismos de derechos humanos.

Un grupo de familiares de los fallecidos ha solicitado una cita con el Papa, pero la reunión aún no ha sido agendada.

"El indulto ha abierto las heridas de miles de víctimas y sus familias, que se sienten traicionadas y consideran que el perdón y la reconciliación no se pueden lograr sin justicia", dijo la agencia de ayuda católica CAFOD en un comunicado.

"Un mensaje sobre estos temas de parte de un líder espiritual sería bienvenido por muchos en Perú", agregó.

Francisco también llega en momentos en que el país es presa de escándalos de corrupción de la brasileña Odebrecht y que involucró a cuatro últimos gobiernos, incluido el de Kuczynski.

La última vez que un Papa estuvo en Perú, un país históricamente conservador, fue hace tres décadas. El fallecido Juan Pablo II estuvo en la nación andina en 1985 para una visita apostólica y en 1988 para un Congreso Eucarístico.

Madre de Dios
Como en Chile, las denuncias de abusos podrían ensombrecer la visita del Papa. La semana pasada, Francisco ordenó que el Vaticano tomara el control de una sociedad católica de elite en Perú. El fundador del grupo es acusado de abusar sexualmente y físicamente de niños y exmiembros de la sociedad.

En medio de los escándalos, el número de católicos ha descendido en el país, al igual que en el resto de Latinoamérica. Un sondeo de la firma Datum publicado el jueves reveló que un 72% se manifiesta como católico en Perú, por debajo del 81% de hace más de una década.

Un tema común del Papa en su viaje a los dos países latinoamericanos es la defensa de los pueblos indígenas.

El viernes prevé visitar la ciudad amazónica de Puerto Maldonado, donde los pueblos indígenas enfrentan riesgos que van desde la extracción de oro contaminando los ríos, la tala ilegal y el tráfico de drogas.

El sábado irá a la ciudad norteña de Trujillo, una calurosa zona devastada por fuertes inundaciones el año pasado y donde realizará una misa en el balneario de Huanchaco.

En su último día en Perú, celebrará una misa en la Base Aérea "Las Palmas", en un distrito limeño, donde sería recibido por cerca de un millón de fieles, según las autoridades, que planean desplegar 33,000 policías para la seguridad del evento.