En el Perú, los artistas siempre han tenido que sortear obstáculos para vivir de su talento. A ellos hoy se añaden las medidas de distanciamiento social y la reducción de aforos que deberán respetar para volver a los escenarios tras un entreacto de más de nueve meses.
El domingo pasado el Ministerio de Cultura publicó los protocolos sanitarios para la reactivación de las actividades de artes escénicas con público en teatros, carpas de circo y otro tipo instalaciones. De acuerdo con estas medidas, los espectáculos podrán reanudarse con aforos reducidos al 40% en espacios cerrados y al 60% en espacios abiertos.
Pedro Iturria, presidente de la asociación cultural Playbill, señala que estas restricciones suponen un gran reto para el sector, pues la reducción de los ingresos sería notable con un público mucho menor. “Es una buena noticia (que se hayan aprobado los protocolos), porque nos van a permitir volver a los escenarios, pero no estoy seguro de que gran cantidad de productores y artistas lo consigan”, dijo a gestion.pe.
Por su parte, Paloma Carpio, miembro del Movimiento Independiente de Artes Escénicas, consideró que, pese a las restricciones, los protocolos generan alternativas para el retorno a los escenarios, lo que “dignifica la condición del artista”.
Iturria, que también forma parte de La Ira Producción, sostuvo que los productores deberán elegir las obras que mejor puedan adaptarse a las nuevas condiciones, como las de menor duración. Las obras cortas pueden presentarse varias veces de forma consecutiva en un mismo día, lo que permitiría a los productores superar en gran parte la pérdida de ingresos por el recorte del aforo.
“Por ejemplo, nosotros tenemos musicales de 30 minutos que podemos presentar tres veces en un mismo día. Si en cada uno tenemos un público correspondiente al 40% del aforo, el público que puede acudir a las tres obras equivaldría al 120% del aforo”, expresó.
Con respecto a las locaciones, sostuvo que se buscará realizar la mayor cantidad de presentaciones en espacios abiertos, pues así podrán recibir a un mayor número de personas. Además, opinó que sería conveniente que las productoras lleguen a acuerdos para compartir la infraestructura y los gastos que esta acarrea.
Unipersonales
Asimismo, consideró que serán privilegiados los espectáculos con menor número de actores, para cumplir con las restricciones sanitarias. “Las productoras tienen que elegir obras que se adecúen a los protocolos, por ejemplo, obras de dos actores. Por lo que he conversado con otros productores, estoy seguro de que empezarán a hacer esto y sobre todo van a presentarse monólogos y unipersonales”, agregó el gestor cultural.
En su opinión, las obras de mayor duración solo serían viables si el precio de los boletos se incrementa o los teatros reducen sus tarifas. La mayoría de las productoras, señala, se preparan para levantar los telones en marzo.
Con respecto a los shows de stand up comedy, Elizabeth Cuya, fundadora de la productora Hay Función, señala que lo más usual eran las presentaciones en ruleta de comedia, en las cuales cada comediante sucedía a otro para presentar un breve monólogo. Pero, dadas las restricciones de aforo, este formato ya no sería tan rentable y tendría que ceder paso a los unipersonales.
Cuya, quien también es comediante, indica que la mayoría de shows de este tipo de realizaban en bares que, a diferencia de los teatros, no cobraban un monto por alquiler, sino que ganaban por el consumo del público que los artistas atraían. Por ahora esa posibilidad está tan cerrada como los bares, por lo cual los teatros son la única alternativa para realizar los shows de comedia con público.
“Lo más conveniente ahora sería hacer unipersonales, pero no todos los comediantes tienen preparados shows como estos (de mayor duración). Quienes van a tener mayor oportunidad son los comediantes con alcance masivo que puedan llenar un teatro”, explicó.
Continuarán transmisiones
Para la productora Hay Función todavía no resultaría viable volver a los shows presenciales, pues con las restricciones actuales no cuenta con la seguridad de “poder retribuirles a los artistas el talento que dejan en los escenarios”, en palabras de Elizabeth Cuya. Por ello, sus comediantes continuarán con las transmisiones online en las que se estrenaron durante el estado de emergencia.
En tanto, Iturria señala que las presentaciones por redes sociales continuarán, pues abrieron la posibilidad de internacionalizar las obras peruanas y de llegar a diferentes departamentos del país al mismo tiempo. “El 30% de nuestro público provenía de otras ciudades o de otros países. Estamos evaluando hacer obras presenciales que también puedan verse online”, expresó.
Promoción de la cultura
Paloma Carpio sostuvo que las mayores oportunidades para producir nuevamente obras de teatro las tienen los centros culturales respaldados por universidades y municipalidades. Además, señaló que estas últimas son las más llamadas a promover las artes escénicas en un contexto como el actual. Por un lado, para impulsar a los artistas locales y por otro para contribuir a la salud mental de la población, que se ha visto afectada por los meses de confinamiento.
“Se sabe que los gobiernos locales han tenido un déficit muy alto de su capacidad de ejecución de su presupuesto en el 2020. Lo que correspondería es que esos saldos puedan destinarse a la cultura”, expresó.