Ministerio de Educación alista estándares para colegios privados

“Estamos preocupados por algunas condiciones que se observan en los colegios”, admitió el ministro de Educación, Martín Benavides.

En este sentido, anunció que en dos meses su despacho tendrá listo “un modelo básico de calidad”, similar al que ya existe en las universidades y con el cual la Sunedu las fiscaliza y evalúa.

“Hay ya iniciativas en discusión, y sobre la base de ellas se diseñará un plan”, señaló en “Agenda Política”.

Agregó que dichos estándares se van a coordinar con los consorcios de los colegios privados y con los especialistas del sector. “En educación, hay ideas para todos los gustos”, agregó.

Dinero no

El titular de Educación indicó que este modelo no va a involucrase en temas como las pensiones o cuotas de ingresos en los colegios privados, pero sí sostuvo que “hay que evaluar” si se fiscaliza el uso de recursos de las instituciones educativas, que gozan de beneficios tributarios, pues son instituciones sin fines de lucro.

“Hay que ver que esos recursos tengan una finalidad educativa”, añadió.

En la mira

Para Benavides, el sector privado y el público deben ser fiscalizados.

En esta línea, indicó que el Ejecutivo emitió un decreto de urgencia para regular a los colegios privados.

“El decreto va en la línea de desarrollar un proceso de autorización en los colegios privados, y creemos que lo mismo debemos hacer en los colegios públicos”, detalló Benavides.

También refirió que desde el Estado “se confió en que el mercado pueda autorregularse, pero la informalidad que hemos tenido también se llevó al sector educativo”.

En este sentido, el hecho de que no haya ningún tipo de regulación tanto a nivel universitario como no universitario permitió que se den malas prácticas en el sector, pese a que existen iniciativas que deben ser destacadas, apuntó Benavides.

El ministro sostuvo que con los nuevos estándares para la educación básica se procederá a una evaluación gradual de las instituciones.

“Pero que se les debe dar la oportunidad a los actores a adaptarse y no ir de frente a la clausura, a menos que estén en la informalidad. Allí simplemente no pueden operar”.