El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, afirmó hoy que el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, demostró "firmeza y liderazgo para firmar decisiones importantes", entre las que destacó el indulto al expresidente Alberto Fujimori.
Tras reunirse hoy con Kuczynski en el Palacio de Gobierno de Lima durante una visita a Perú, Almagro aseguró que Kuczynski "era consciente obviamente de los riesgos" que implicaba eximir a Fujimori, de 79 años, de cumplir los once años de prisión que le restaban por delitos de lesa humanidad.
"Definitivamente hacemos lo señalado por el sistema interamericano, pero demostró firmeza y liderazgo para firmar decisiones que eran importantes", señaló Almagro.
El secretario general de la OEA reveló que Kuczynski le anticipó su intención de perdonar la pena a Fujimori cerca de dos meses antes de que firmara la resolución y más de un mes antes de la moción surgida en el Congreso para despojarlo del cargo.
"Fue el 2 de noviembre en Buenos Aires, en una cena en el Teatro Colón, cuando me refirió su iniciativa de otorgar el indulto a Fujimori, mucho antes de cualquier pedido de vacancia", dijo Almagro.
En esa votación celebrada el 21 de diciembre, Kuczynski conservó su cargo gracias a la abstención de diez congresistas fujimoristas liderados por Kenji Fujimori, hijo menor del expresidente, quien le había pedido al mandatario indultar a su padre, lo que hizo solo tres días más tarde, coincidiendo con Nochebuena.
El indulto a Fujimori está recurrido ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) por los familiares de los veinticinco asesinados en las matanzas de Barrios Altos (1991) y La Cantuta (1992), perpetradas por el grupo militar encubierto Colina, por las que Fujimori fue condenado en 2009 a 25 años de prisión como autor mediato (con dominio del hecho).
Asimismo, la Sala Penal Nacional debe decidir si incluye a Fujimori en el proceso por la matanza de Pativilca, también cometida por el grupo Colina, pues el indulto iba acompañado de una gracia para no ser juzgado por otros delitos similares de los que fue perdonado.