Recomendaciones para el regreso al trabajo presencial

Ante la inminente llegada del 2022, las empresas ya están preparando el regreso al trabajo presencial. Gracias a las medidas sanitarias del gobierno, y a los grandes avances en la vacunación, ya son muchas las personas que están volviendo a las oficinas.

Y es que la normalidad en la que nos vamos a desempeñar no será la misma que antes. Por ello, para ese regreso deben considerarse varios aspectos claves que garanticen la seguridad para los colaboradores.

Para tal efecto, creemos que las empresas deben plantearse, en primer lugar, políticas claras de salud y seguridad, lo más explícitas posible, y en cuya elaboración participen todas las áreas de la organización.

Otros puntos prioritarios sobre los cuales deben elaborarse políticas detalladas deben ser los de retención de empleados y reclutamiento. Este proceso, si bien debe ser liderado por el área de Recursos Humanos, es esencial que también sea un equipo multidisciplinario.

Como una forma de aportar a las empresas para que tengan más alcances de cómo regresar físicamente de forma segura a sus oficinas, Colliers ha recopilado toda su experiencia relativa al regreso a la presencialidad, recogida en los 65 países donde opera, en un manual con consejos útiles en cinco áreas claves.

En primer lugar, está el tema de los protocolos de bioseguridad. El foco aquí es contar con los procedimientos correctos para asegurar un exitoso regreso a la oficina.

Otro aspecto a atender son los servicios del edificio. Aquí debe revisarse el programa de servicios del local donde se encuentran las oficinas, con el fin de adaptarlo al cambio de los patrones de trabajo de los empleados.

Luego debe atenderse a la preparación de los lugares de trabajo: escritorios, salas de reuniones, etc. Todos ellos deben estar preparados y, de ser el caso, modificados para que los colaboradores puedan laborar confortablemente.

También hay que revisar si se cuenta con las soluciones tecnológicas adecuadas, tanto para gestionar un retorno total a la oficina, como para quienes seguirán laborando de forma híbrida o remota.

Finalmente, se debe contar con procesos y materiales de comunicación para responder satisfactoriamente a las consultas de los colaboradores sobre el regreso a la oficina.