DISTRITOS. Lima es la provincia con mayor población y, por ende, es también donde se concentra el mayor número de contagios por COVID-19. Hay un trabajo a nivel nacional que con mayor o menor éxito el Gobierno ha venido desarrollando, pero las cifras actuales, así como la decisión de ir permitiendo el inicio de algunas actividades, obliga a aplicar medidas mucho más diferenciadas. Así como el Gobierno decidió hacer toques de queda regionales, toca ahora mirar a cada provincia e, incluso, a cada distrito.
En el caso de Lima, más allá de poner el foco en los mercados, no se ha realizado un trabajo específico con cada distrito. Ya existe un mapa de calor -elaborado por Essalud- que muestra el nivel de contagio por distritos e, incluso, por zonas dentro de los mismos. Se tiene data de los lugares con mayor número de contagios y casos por metro cuadrado. La información no debe ser anecdótica, es necesario utilizarla para mejorar el combate a la pandemia.
Es por eso que no está de más mirarse el ombligo. Al contrario, las medidas que se adopten deben considerar las particularidades de cada sector. No es lo mismo permitir la salida a caminar para los niños, el servicio de delivery de comida preparada o el reinicio de actividades de empresas en las zonas donde el porcentaje de contagios es bajo que donde es muy alto. Las cifras hacen necesario más cuidado, las autoridades necesitan brindar atención focalizada y apoyo a las zonas que más lo requieren. Quizás en algunas manzanas sea necesaria la inmovilización social obligatoria las 24 horas, pero con apoyo de la municipalidad para hacerles llegar los bienes de primera necesidad que se requieren para implementar una medida de ese nivel. Justamente es lo que hace el programa “Te Cuido Perú”, liderado por el Ministerio de Defensa, y que debe extenderse con mayor rapidez.
Otro aspecto que también debe ser manejado con criterio diferenciado es el del transporte, sobre todo porque los servicios masivos, como el tren eléctrico o el Metropolitano y los corredores, dependen de instancias locales. Se ha planteado la reducción de unidades y el aforo de cada una, lo que sumado al “pico y placa” disminuyen considerablemente la capacidad para trasladar a la población que empiece a laborar. Como respuesta se ha propuesto el ingreso escalonado a los centros de trabajo, pero no existe ninguna información oficial por parte del Ministerio de Trabajo ni se sabe de coordinaciones con las empresas.
El Gobierno central está en la obligación de establecer las medidas generales, pero para el combate efectivo contra la pandemia requiere aplicar medidas más segregadas.