Editorial: Un buen mes para los metales

TENDENCIA AL ALZA. Las cotizaciones de los principales metales que exporta el Perú han tenido en agosto un mes muy favorable. El cobre, por ejemplo, cerró ayer en su mayor nivel en tres años.

Y en el mes pasado, el metal industrial avanzó alrededor del 7%, mientras que el zinc tuvo una ganancia de más de 10%. En cuanto a los metales preciosos, el precio del oro aumentó casi en 4%.

El renovado atractivo de los metales se viene dando en medio de mayores tensiones geopolíticas, un mejor panorama para la economía de Estados Unidos y para China, el principal consumidor de materias primas.

Asimismo, la cada vez menor probabilidad de que la Reserva Federal de los Estados Unidos continúe incrementando su tasa de interés de referencia este año también resta fuerza al dólar frente a otras monedas.

En tanto la divisa norteamericana mantenga esa tendencia, continuará siendo un factor positivo para los precios de los commodities en general.

Las perspectivas podrían continuar optimistas si China sostiene su ritmo de crecimiento económico y se registra mayor evidencia de que su "desaceleración" tocó fondo. Hasta ahora, Beijing ha reafirmado sus planes de seguir impulsando tasas de crecimiento de alrededor de 6.5%.

En cuanto al oro, las tensiones con Corea del Norte o los lamentables ataques terroristas en Europa seguirían empujando a los inversores hacia activos refugio.

A ello se ha sumado la menor expectativa sobre el millonario plan de inversiones del Gobierno de Donald Trump. Nuevas tensiones del mandatario con miembros de su propio partido, y hasta con líderes empresariales, acentúan las dudas sobre la agenda económica que pretendía materializar.

Es en este contexto que los precios de los metales pueden avanzar o mantener sus actuales niveles, situación muy favorable para países como el Perú o Chile, que afrontan periodos de desaceleración. El lento crecimiento ya le costó a Chile incluso una rebaja en su calificación de riesgo. Pero a la luz de los recientes datos, parece evidenciar señales de mejora, situación que ya se aprecia en nuestro país.

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