Los ministros de Agricultura de la Unión Europea (UE) manifestaron su intención de ayudar a Ucrania a exportar sus productos agrícolas, ante el bloqueo por parte de Rusia del mar Negro, la vía habitual para que las mercancías ucranianas lleguen a otros países.
“La ronda de intervenciones (de los ministros) ha mostrado la urgencia compartida de estar en condiciones de ayudar a Ucrania a exportar sus cereales. Es necesario para Ucrania, es indispensable en un momento en el que los mercados internacionales están tensionados y es indispensable ante la perspectiva de las próximas cosechas”, declaró el ministro francés de Agricultura, Marc Fesneau, cuyo país ocupa la presidencia semestral de la UE.
El político se expresó así tras la reunión de ministros de Agricultura de los Veintisiete celebrada en Bruselas, en la que se abordó el impacto de la invasión rusa de Ucrania sobre los mercados agroalimentarios.
En ese sentido, la Comisión Europea (CE) presentó durante la cita su plan para ayudar a Ucrania a acelerar la exportación de sus productos agrícolas ante el bloqueo del mar Negro y facilitar así la salida de 20 millones de toneladas de cereal hacia la UE y el resto del mundo.
Ucrania es uno de los cinco mayores exportadores de cereales del mundo y, en circunstancias normales, el 75% de su producción se exporta.
El bloqueo de las exportaciones supone un riesgo para la seguridad alimentaria mundial, en particular, para zonas de África y Oriente Medio, pero el establecimiento de rutas de transporte alternativas al mar Negro también plantea un reto logístico.
Al llegar a la reunión, el ministro español, Luis Planas, ya expresó el apoyo de su país al plan comunitario, pero reconoció que facilitar la exportación de los productos agrícolas ucranianos es “tremendamente complejo”.
“Estamos hablando de sustituir la salida del mar Negro por barco, que es el método tradicional de transporte de cereales, por hacerlo por vía terrestre: camiones o trenes. Es muy complicado, pero apoyamos todos los esfuerzos. Es muy importante desde el punto de vista del abastecimiento”, comentó.
Más allá de la ayuda a la exportación, los ministros debatieron el abastecimiento de la población ucraniana, las consecuencias de la guerra para la seguridad alimentaria mundial, la situación de los mercados agrícolas y los precios de los insumos, de los productos agrícolas y de los alimentos.
Sobre la situación de los mercados agrícolas europeos, Fesneau constató que se afronta “un contexto difícil” por los precios elevados de los insumos, “reforzados por la invasión de Ucrania”, y por la sequía que afecta a partes de la UE.
“Los ministros han hecho un llamamiento para que se haga un seguimiento de los mercados para poder reaccionar más allá de las medidas ya tomadas, si hiciera falta, este verano”, señaló el titular de Agricultura galo.
Preguntado por la posibilidad de que Rusia termine imponiendo controles a las exportaciones de trigo no solo de su territorio, sino también a las de otros socios comerciales euroasiáticos, el comisario europeo de Agricultura, Janusz Wojciechowski, dijo que “no le sorprende nada ya”.
“Rusia en su historia y hoy muy clara y abiertamente en su agresión contra Ucrania está mostrando que atacar los sistemas de suministro de alimentos, la desestabilización de la seguridad alimentaria en la dimensión global, es el objetivo de Rusia, es uno de los objetivos de esta guerra y uno de sus instrumentos”, comentó el político.
Por otro lado, los ministros aprobaron unas conclusiones en las que apoyan la vacunación como herramienta complementaria para la prevención y el control de la gripe aviar altamente patógena (IAAP), que este año se ha propagado por zonas no habituales, incluida España.
A su llegada al encuentro, Planas llamó a “llevar mucho cuidado de que esta vacunación sea compatible con las normas internacionales, particularmente, de la Organización Internacional de Sanidad Animal, en relación con el comercio”.
Durante la reunión también se abordaron los preparativos para la próxima conferencia ministerial de la Organización Mundial del Comercio (OMC), que se celebrará en junio en Ginebra.
Según el ministro francés, los titulares de Agricultura desean “un compromiso de los miembros de la OMC a favor de la seguridad alimentaria, especialmente, con la transparencia en los mercados agrícolas y las políticas agrícolas, y la ausencia de restricciones a las exportaciones”.
En la reunión de este martes, la CE se comprometió a estudiar la posibilidad de proponer una lista única para toda la UE con las mascotas permitidas en el club comunitario, de modo que no sería posible tener como animal de compañía especies no incluidas en el posible futuro catálogo.
El Ejecutivo comunitario, igualmente, confió en que los Estados miembros puedan votar “tan pronto como sea posible, incluso mañana si es posible” la aplicación del tratamiento en frío, que impide la llegada en las frutas de plagas como la falsa polilla, a las importaciones extracomunitarias de cítricos.
España reclama aplicar ese mecanismo a las importaciones de cítricos que llegan a la UE desde países terceros como Sudáfrica.