Las recientes “actividades ilegales violentas” en Hong Kong “han pisoteado severamente el estado de derecho y el orden social” en la ciudad semiautónoma, dijo el presidente chino Xi Jinping, informó el Diario del Pueblo.
La violencia ha "desafiado seriamente el principio básico de "un país, dos sistemas", dijo Xi en una cumbre de los países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) en la capital brasileña Brasilia.
Manifestantes prodemocracia paralizan el jueves Hong Kong por cuarto día seguido, con barricadas y manifestaciones, que llevaron a la policía a pedir refuerzos para la ciudad de 7.5 millones de habitantes.
China “da un apoyo firme” al gobierno de Hong Kong y su policía, dijo el presidente chino. Añadió que “poner fin a la violencia y restaurar el orden es la tarea más urgente por cumplir”.
El movimiento de protesta se inició en junio con manifestaciones para denunciar un retroceso de las libertades y la influencia creciente de China en el territorio devuelto por Gran Bretaña a China en 1997.
Desde el abandono a inicios de septiembre del texto por el que se autorizan las extradiciiones a China, lo que originó el movimiento de protesta, el gobierno hongkongués rechaza hacer nuevas concesiones a los manifestantes.
La fractura se amplía con el aumento de los enfrentamientos entre la policía y los manifestantes, con escenas de violencia cada vez más frecuentes.
Ya tensas después de la muerte el viernes de un estudiante de 22 años que cayó en parking, la situación se deterioró el lunes por la mañana cuando un policía hirió por bala un manifestante no armado, que sigue en estado crítico.