Mientras videos y fotos horripilantes de cadáveres emergen de Bucha, un suburbio de Kiev, la prensa aliada al Kremlin está diciendo que son un engaño sofisticado — una narrativa que los periodistas en Ucrania han mostrado es falsa.
La táctica de diseminar falsedades o decir que noticias son falsificaciones para sembrar confusión y socavar a sus adversarios son tácticas que Moscú ha empleado durante años para sembrar confusión o socavar a sus adversarios, y que ha refinado con el advenimiento de las redes sociales en sitios como Siria.
En transmisiones para millones de televidentes, corresponsales y presentadoras de los canales estatales rusos dijeron el martes que alguna evidencia en foto y video de la masacre era falsa mientras que otra mostraba que los ucranianos eran responsables.
“Entre los primeros en aparecer estuvieron esas fotos ucranianas, que mostraban cómo un cuerpo sin alma de pronto mueve un brazo”, dijo un reporte el lunes en el programa Rusia-1. “Y en el espejo retrovisor es discernible que los muertos parecen estar levantándose de nuevo”.
Pero las imágenes de satélite de inicios de marzo mostraron que los muertos quedaron abandonados en las calles de Bucha durante semanas. El 2 de abril, un video tomado desde un automóvil en marcha y colocado en la internet por un abogado ucraniano mostró esos mismos cadáveres esparcidos en la calle Yablonska, en Bucha.
Imágenes de alta resolución de Bucha tomadas por un satélite de Maxar Technology y revisadas por la Associated Press independientemente correspondieron la localidad de los cadáveres con videos separados de la escena. Otros medios de prensa occidentales tuvieron reportes similares.
El fin de semana, periodistas de la AP vieron los cadáveres de decenas de personas en Bucha, muchas de ellas baleadas a quemarropa, y algunas con las manos atadas a la espalda. Al menos 13 cadáveres fueron ubicados en y alrededor de un edificio que los residentes dicen fue usado como base por las tropas rusas antes de su retirada la semana pasada.
No obstante, los funcionarios rusos y la prensa estatal han continuado promoviendo sus propias versiones, repitiéndola en periódicos, radio y televisión. Un artículo prominente en el portal de un popular diario pro-Kremlin, el Komsomolskaya Pravda, culpó de los asesinatos masivos a Ucrania, diciendo que había “otra prueba irrefutable de que el ‘genocidio de Bucha’ fue cometido por fuerzas ucranianas”.
Una columna de opinión publicada el martes por la agencia noticiosa estatal RIA Novosti afirmó que los asesinatos en Bucha eran un ardid de Occidente para imponerle sanciones más duras a Rusia.
Analistas apuntan que no es la primera vez en su invasión de seis semanas a Ucrania que el Kremlin ha empleado esa estrategia de negar atrocidades y diseminar desinformación en una campaña coordinada por todo el mundo.