La ONU espera próximamente un fuerte aumento del tránsito de barcos con exportaciones de cereal ucraniano, una vez aclarados los procedimientos pactados entre Kiev y Moscú para permitir el tránsito por el mar Negro y tras la salida de buques que llevaban meses atrapados en los puertos.
Así lo señaló hoy Frederick Kenney, el coordinador de Naciones Unidas en el Centro de Coordinación Conjunta (JCC), órgano establecido en Estambul para velar por el cumplimiento del acuerdo sellado para desbloquear las exportaciones de grano desde Ucrania, que estuvieron meses paralizadas por el bloqueo naval ruso y las minas colocadas por fuerzas ucranianas para impedir un desembarco del enemigo.
Kenney, en una conferencia de prensa por video, dijo que espera ver pronto “un gran repunte” de las solicitudes para transitar por el mar Negro bajo esta iniciativa y que, con ello, se puedan dirigir importantes cantidades de trigo y otros productos a países muy necesitados.
“Hemos visto un tremendo interés por parte de los propietarios de barcos”, aseguró el responsable de la ONU, que dijo que hay un número de embarcaciones vacías que se encuentran en aguas turcas a la espera de cerrar los contratos para entrar a puertos ucranianos a cargar cereal.
Naciones Unidas fue uno de los principales impulsores del acuerdo que finalmente ha permitido desbloquear las exportaciones ucranianas y lo ha considerado un elemento clave para paliar una crisis alimentaria mundial en medio de un fuerte aumento del precio de la comida.
Cuestionado por el hecho de que la mayoría de los barcos que han partido hasta ahora no se hayan dirigido a países con grave escasez o hambruna, Kenney recordó que los puertos ucranianos estaban “básicamente congelados en el tiempo el 24 de febrero”, cuando se inició la invasión rusa, y que ya había barcos cargados, principalmente de maíz, que era la principal cosecha en ese momento.
“Era imperativo sacar esos barcos para que puedan entrar otros que se dirijan a puertos que contribuirán a la seguridad alimentaria”, recalcó.
En las últimas horas, Rusia ha cuestionado la urgencia de estos envíos de cereal con el argumento de que los barcos hayan tenido como primeros destinos puertos del Líbano, el Reino Unido, Irlanda o Turquía, y no de otros países más necesitados.
“Aparentemente nadie está pensando en los países necesitados o en los países en desarrollo en general. Parece que toda esta historia era una cortina de humo para los países occidentales”, dijo hoy en Twitter el embajador adjunto ruso ante la ONU, Dmitry Polyanskiy.
Naciones Unidas, por su parte, insiste en que el orden de salida de los barcos se basa en acuerdos comerciales que ya estaban sellados y que no habían podido ejecutarse porque las embarcaciones habían quedado atrapadas en los puertos.
Sin embargo, asegura que el acuerdo del mar Negro ya está teniendo un impacto positivo al provocar bajadas en los precios de los mercados globales.
Además, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) anunció que va a fletar un barco para exportar 30,000 toneladas de cereal con fines humanitarios y que irá a los países más necesitados.