Una licencia global para la tecnología serológica que detecta los anticuerpos COVID-19 se proporcionará sin regalías a los países pobres y de ingresos medios bajo el primer acuerdo de este tipo para impulsar la producción, informó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Las cuatro pruebas existentes, que verifican la presencia de anticuerpos contra el SARS-CoV-2 desarrollados después de una infección o una dosis de vacuna, también podrían informar las decisiones sobre la necesidad de refuerzos para proteger contra la enfermedad, dijo en un comunicado.
El acuerdo de licencia no exclusiva alcanzado con el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas (CSIC), un instituto público de investigación que ofrece la tecnología como un bien público global, es la primera licencia de prueba firmada por el Fondo de Patentes de Medicamentos (MPP) de la OMS.
“El objetivo de la licencia es facilitar la rápida fabricación y comercialización de la prueba serológica COVID-19 del CSIC en todo el mundo”, señaló la OMS.
“La licencia estará libre de regalías para los países de ingresos bajos y medianos y seguirá siendo válida hasta la fecha en que expire la última patente”, manifestó.
Las pruebas son fáciles de usar y adecuadas incluso para entornos rurales con una infraestructura de laboratorio básica, agregó.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, acogió con satisfacción el acuerdo que esperaba que inspirara a otros desarrolladores a compartir herramientas contra COVID-19, que ha matado a 5.4 millones de personas desde que surgió el virus en el centro de China en diciembre del 2019.
“Este es el tipo de licencia abierta y transparente que necesitamos para mover la aguja en el acceso durante y después de la pandemia”, declaró Tedros.
“Insto a los desarrolladores de vacunas, tratamientos y diagnósticos COVID-19 a seguir este ejemplo y cambiar el rumbo de la pandemia y de la devastadora desigualdad global que esta pandemia ha puesto de relieve”.
Médicos sin Fronteras (MSF) acogió con satisfacción el acuerdo y señaló que actualmente la OMS solo tiene una prueba de anticuerpos mediante inmunoensayos cuantitativos (ELISA) realizados por Roche Holding AG que solo se puede utilizar con el dispositivo del propio fabricante de medicamentos con sede en Suiza.
“Para superar el monopolio de las grandes empresas de diagnóstico como Roche, y para facilitar la producción y el suministro de pruebas de anticuerpos ELISA fiables en todos los países, la licencia abierta del CSIC a OMS C-TAP (COVID-19 Technology Access Pool) es un importante paso adelante”, dijo el grupo activista.
Sin embargo, una licencia de un propietario de tecnología no es suficiente para abrir la plataforma completa para que los desarrolladores de los países puedan mejorar sus pruebas de anticuerpos COVID-19, agregó.
“Eliminar las barreras de propiedad intelectual en todos los componentes clave de la tecnología y facilitar el intercambio abierto, la puesta en común y la transferencia de tecnologías, datos y conocimientos son importantes para garantizar y mejorar el acceso a los diagnósticos de COVID-19 para todos”, consideró.