Qatar ha vaciado bloques de apartamentos donde viven miles de trabajadores extranjeros en Doha para albergar a los aficionados al fútbol durante la Copa del Mundo, dijeron a Reuters personas que fueron desalojadas.
Trabajadores dijeron que más de una decena de edificios habían sido evacuados y cerrados por las autoridades, lo que obligó a ciudadanos en su mayoría asiáticos y africanos a buscar refugio. Algunos incluso se acostaron sobre el pavimento.
La medida se produce menos de cuatro semanas antes del inicio del torneo mundial de fútbol el 20 de noviembre, que se lleva a cabo en medio de un intenso escrutinio internacional sobre el trato de Qatar a los trabajadores extranjeros.
En un edificio que albergaba a 1,200 personas en el distrito Al Mansoura de Doha, las autoridades dijeron a residentes que a las 20.00 horas del miércoles que debían irse. Los funcionarios municipales volvieron las 22.30, obligaron a todos a salir y cerraron las puertas del edificio, dijeron residentes.
“No tenemos adónde ir”, dijo un hombre a Reuters al día siguiente, mientras se preparaba para dormir en la calle por segunda noche consecutiva con otros 10 hombres, algunos de ellos sin camisa, en medio del calor y la humedad del otoño en el Estado del Golfo Pérsico.
Los trabajadores que hablaron con Reuters se negaron a dar sus nombres o detalles personales por temor a represalias. Cerca, cinco hombres cargaban un colchón y un pequeño refrigerador en la parte trasera de una camioneta. Habían hallado una habitación en Sumaysimah, a unos 40 km de Doha.
Un funcionario del gobierno de Qatar dijo que los desalojos no están relacionados con la Copa del Mundo y que habían sido organizados “en línea con los planes integrales y a largo plazo en curso para rediseñar áreas” de la capital.
El organismo rector del fútbol mundial, la FIFA, no respondió a una solicitud de comentarios y los organizadores de la Copa del Mundo de Qatar dirigieron las consultas al gobierno.
Mohammed, un conductor de Bangladés, dijo que había vivido en el mismo barrio por 14 años hasta el miércoles, cuando el municipio le dijo que tenía 48 horas para dejar la vivienda que compartía con otras 38 personas.
“¿Quién hizo los estadios? ¿Quién hizo las carreteras? ¿Quién hizo todo? Los bengalíes, los paquistaníes. Gente como nosotros. Ahora nos están obligando a todos a salir”, afirmó.
Fuente: Reuters