Con música de mariachi y un letrero con la leyenda “Welcome back”, la isla Cozumel, en el Caribe Mexicano, recibió a los pasajeros del crucero Adventure of the Sea, el primero en regresar tras 15 meses de inactividad por la pandemia de COVID-19.
El navío, con unos 1,000 pasajeros, zarpó el 12 de junio desde Nasáu, en las Bahamas, y arribó este miércoles a las 6:30 (11:30 GMT).
Un grupo de turistas, en su mayoría estadounidenses, descendió para explorar la isla, pero las lluvias provocadas por una depresión tropical en el golfo de México desanimaron a varios.
Michael Williams, un jubilado de 62 años, relató que es su primer viaje desde que inició la pandemia y se siente como una “emocionante aventura”. “Estaba ansioso por tomar este crucero y navegar”, agregó.
El 94% de los pasajeros ya fue vacunado contra el coronavirus en sus países de origen, mientras que el otro 6% son menores de 16 años, dijo Alberto Muñoz, vicepresidente para Latinoamérica de Royal Caribbean, operadora del crucero.
En junio regresará también Celebrity Cruise Lines, mientras que Carnival Corporation haría lo propio en julio, con arribos a Cozumel y Mahahual, también en Quintana Roo, detalló Darío Flota, titular del Consejo de Promoción Turística estatal.
Reconoció que son pruebas piloto de las navieras, con pocos pasajeros y frecuencias, y que el retorno a la normalidad tomará tiempo.
Quintana Roo, el estado con mayor recepción de turistas extranjeros, se mantiene en un nivel alto de alerta sanitaria pese a que la mayor parte del país ya normalizó sus actividades ante el retroceso del COVID-19. Acumula 29,660 contagios y 2,891 defunciones.
En Cozumel, la industria de cruceros es la principal actividad económica, con más de 100,000 personas dependientes de ella, directa o indirectamente.
En 2019, representó ingresos por US$ 1,272 millones, según datos del gobierno estatal. En 2020, cayó hasta US$ 492 millones.