La nave espacial Lucy inició este sábado con éxito una misión de 12 años a los llamados asteroides troyanos, una región no explorada hasta ahora donde puede haber información para comprender cómo se formó el Sistema Solar hace 4,500 millones de años.
La misión Lucy de la NASA, que viajará ese tiempo observando un asteroide del cinturón principal y siete asteroides troyanos, es la primera de la historia dedicada a estudiar los troyanos que pueden proveer información sobre cómo se formó el Sistema Solar.
Luego de sembrar una gran expectativa, el arranque de la misión contó hoy con un amanecer espléndido en la costa este de Florida (EE.UU.), donde se produjo el lanzamiento.
A bordo de un cohete Atlas 5 de la empresa United Launch Alliance (ULA, en inglés), la nave espacial se separó del cohete sin problema alguno, mientras el equipo de científicos de Lucy esperaba “emocionado”, según describió en Twitter, el momento del despliegue de sus paneles solares.
La grandeza del espacio
El lanzamiento se produjo a las 05:34 a.m. hora local (09:34 GMT) desde el Centro Espacial Kennedy de Cabo Cañaveral, Florida (EE.UU.), donde se produjeron aplausos durante del momento de la separación del cohete y luego del despliegue de los dos paneles solares de 7 metros de largo, fundamentales para el funcionamiento de la nave.
Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA, afirmó en ese momento en Twitter: “Lo crea o no, la Misión Lucy está más cerca de Júpiter ahora que cuando llegue a los asteroides troyanos. ¡El espacio es GRANDE!”.
Según el sitio web de la misión, Lucy será la primera en explorar una población de pequeños cuerpos conocidos como troyanos, o lo que es lo mismo, asteroides exteriores del Sistema Solar que orbitan alrededor del Sol “enfrente” y “detrás” del gigante y gaseoso planeta Júpiter.
De acuerdo con la misma fuente, estos asteroides se encuentran equidistantes entre el Sol y Júpiter.
En su misión, Lucy seguirá a un asteroide del cinturón principal entre Marte y Júpiter y a siete troyanos, pequeños remanentes del Sistema Solar primitivo atrapados en órbitas estables y agrupados en dos “enjambres” que guían y escoltan a Júpiter en su camino alrededor del Sol.
Según la NASA, los siete asteroides troyanos son el binario Patroclus/Menoetius, Eurybates, Queta, Orus, Leucus y Polymele más el asteroide del cinturón principal DonaldJohanson.
“Estos cuerpos primitivos contienen pistas vitales para descifrar la historia de nuestro Sistema Solar e incluso pueden informarnos sobre los orígenes de los materiales orgánicos, e incluso de la vida en la Tierra”, detalla el sitio www.lucy.swri.edu.
Este portal ha llevado una cuenta regresiva desde que se anunció oficialmente la misión hasta el amanecer de este sábado, cuando Lucy tomó altura sujetada al cohete y luego se separó para emprender su largo viaje.
“Doce años, ocho asteroides, una nave”, reza el lema de la misión.
La nave estudiará a los asteroides en pocos minutos, mientras los sobrevuele en la distancia más cercana que será de un promedio de unos 1,000 kilómetros.
Para ello, va equipada con los instrumentos L’TES, L’Ralph, y L’LORRI, que recopilarán los datos necesarios para intentar desvelar los misterios de la formación de los planetas.
De acuerdo con la NASA, Lucy utilizará sus sensores remotos en siete asteroides troyanos diferentes para abordar objetivos científicos como “geología de superficie”, “color y composición de la superficie” y buscará anillos y satélites de los asteroides troyanos.
La misión lleva el mismo nombre del fósil Australopithecus Afarensis, de más de 3 millones de años, que fue descubierto en 1974 en Etiopía y bautizado como la canción de los Beatles, “Lucy in the sky with diamonds”.
Aquel fósil fue un hallazgo clave para el estudio de la evolución humana y, ahora, esta misión espacial puede ser una oportunidad única para entender nuestros orígenes planetarios y quizás para averiguar cómo la vida llegó a la Tierra.
Un viaje interactivo de doce años
“El espacio es grande. Realmente grande. Y viajar distancias tan lejanas lleva mucho tiempo. Pasarán seis años antes de que la Misión Lucy finalmente alcance su primer asteroide troyano. Manténgase en contacto con el viaje de Lucy creando el suyo”, invitó en redes sociales la NASA.
Desde principios de este mes, la agencia estadounidense ha venido tentando a los amantes del espacio a que participen de muchas maneras en la misión.
Por ejemplo, ha invitado a los curiosos a construir su propia cápsula del tiempo, así como la nave lleva consigo una cápsula del tiempo con mensajes inspiradores de pensadores y poetas laureados de distintas nacionalidades.
También ha facilitado un “pasaporte de lanzamiento virtual” para los curiosos.
“¿Dónde estarás y qué harás en agosto de 2027? ¿Y en marzo de 2033? La NASA sabe exactamente dónde estará la nave espacial Lucy: ¡volando por asteroides troyanos nunca antes explorados!”, afirma la agencia mientras invita a marcar “hitos” de Lucy en el calendario de los seguidores.
Por ejemplo, el 20 de abril de 2025 “Lucy pasará volando por el asteroide del cinturón principal (52246) Donaldjohanson”, y el 12 de agosto de 2027 “tendrá su primer encuentro no con uno, sino con dos asteroides troyanos: Eurybates (3548) y su satélite, Queta”, detalla la NASA.
La misión finaliza en 2033 pero Lucy continuará “orbitando el Sol, pasando a través de los enjambres de troyanos alternos durante cientos de miles, si no millones, de años”, proyectó la agencia espacial.