La Reserva Federal (Fed) está preparada para subir la tasa de interés de medio punto porcentual en mayo y para dos alzas aún mayores en las siguientes reuniones, según apuestas de los operadores este viernes, un día después de que el presidente de la Fed, Jerome Powell, señaló que estaba abierto a “adelantar” el retiro de la política monetaria ultraexpansiva.
Los contratos de futuros ligados a la tasa de política de la Fed reflejan ahora una abrumadora expectativa de un aumento de los costos de los préstamos a corto plazo al rango del 0.75%-1% en la reunión de la Fed del 3 al 4 de mayo, y a uno de 2%-2.25% al cierre de su reunión del 26-27 de julio.
Economistas de Nomura Research prevén que la Fed suba 0.75 puntos porcentuales en cada una de las reuniones de junio y julio del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC), el que fija las tasas.
“Un precio (de mercado) más fuerte para tal movimiento probablemente facilitaría el camino para el FOMC y los participantes probablemente podrían forjar un consenso sobre tal acción rápidamente”, escribieron en una nota publicada a principios del viernes.
La Fed elevó su tasa de política monetaria un cuarto de punto porcentual el mes pasado, en su primer aumento después de lo que habían sido dos años de un tipo casi cero, aunque “muchos” responsables de la Fed consideraron que serían apropiadas mayores alzas, señaló Powell el jueves
“Cincuenta puntos básicos estarán sobre la mesa en la reunión de mayo”, dijo Powell. “También creo que hay algo en la idea de adelantar” la retirada de la flexibilidad, añadió.
La Fed elevó su rango objetivo para la tasa de interés de los fondos federales hasta 0.25%-0.50% en marzo, desde el rango de 0%-0.25% en el que había estado durante los dos años anteriores.
Para aumentar la sensación de urgencia, incluso los responsables más moderados de la política monetaria de la Fed, como la presidenta de la Fed de San Francisco, Mary Daly, y el jefe de la Fed de Chicago, Charles Evans, han apoyado esta semana la idea de una subida de medio punto en mayo y de situar las tasas de interés en un nivel “neutral” a fin de año.
La mayoría de los miembros del banco central estadounidense afirman que ese nivel está probablemente entre el 2.25% y 2.5% a largo plazo.
Sin embargo, con una inflación tan elevada -los precios al consumo subieron 8.5% el mes pasado-, algunos observadores afirman que las tasas de interés tendrán que subir aún más para que el costo “real” de los préstamos sea lo suficientemente alto como para empezar a afectar la actividad económica.
Daly dijo a principios de esta semana que cree que entre el 2.25% y 2.5% sigue siendo una estimación “razonable” para la neutralidad, pero señaló que las autoridades no lo sabrán realmente hasta que las tasas se acerquen a ese nivel y puedan observar lo que ocurre en la economía.