El colombiano Alex Saab, presunto testaferro del ilegítimo presidente Nicolás Maduro, lideró una “operación transnacional de lavado de activos” que involucra a políticos de Venezuela, Ecuador y Colombia, determinaron congresistas ecuatorianos en una investigación que compartieron con Bogotá.
Fernando Villavicencio, presidente de la comisión de fiscalización del Congreso de Ecuador, viajó a Bogotá y entregó este martes al presidente Iván Duque un informe de 125 folios sobre el supuesto entramado de corrupción orquestado por Saab, detenido en Estados Unidos.
La comisión “nos ha hecho una exposición clara, detallada, certera” que salpica a “personas cercanas a gobiernos de varios países, incluyendo el régimen dictatorial de Venezuela, anteriores gobiernos en el caso del Ecuador, y también políticos colombianos y personas que han estado vinculadas a la contratación estatal”, declaró Duque sin identificar a los implicados.
Saab, de 49 años, fue arrestado en junio del 2020 durante una escala en Cabo Verde y extraditado en octubre pasado por requerimiento de la justicia estadounidense, que lo considera testaferro de Maduro.
El asambleísta Villavicencio, opositor del expresidente ecuatoriano Rafael Correa, dijo tener “una prueba irrefutable” sobre un viaje de la exsenadora colombiana Piedad Córdoba en un avión privado de Saab.
“Hay evidencia suficiente que pone a la señora Piedad Córdoba en una relación cercana a Alex Saab y el palacio de Miraflores, me refiero al gobierno chavista”, precisó Villavicencio.
Córdoba negó los señalamientos en Twitter: “Preparo proceso judicial contra ese miserable”, advirtió.
La fiscalía estadounidense estima que Saab y su socio, el prófugo colombiano Álvaro Pulido, recibieron unos US$ 350 millones obtenidos ilegalmente en Venezuela para blanquearlos en Estados Unidos.
Según la acusación, crearon una red de sobornos por medio de un contrato firmado con el gobierno venezolano en noviembre del 2011 para construir viviendas destinadas a personas de bajos ingresos.
“Se establecen también vínculos con empresarios que se prestaron para tener operaciones de testaferrato y blanqueo de dinero y que fueron receptores de fraudes fiscales en varios países a través de cuentas registradas en paraísos fiscales”, añadió Duque.
De acuerdo a la exposición de Villavicencio, el fraude a las reservas monetarias de Ecuador se saldó en US$ 2,697 millones.
Saab afronta un cargo de conspiración para lavar dinero, que se castiga con penas de hasta 20 años de cárcel en Estados Unidos. El empresario se declara inocente de los delitos que se le imputan.
Su extradición enfureció al régimen de Maduro, que dio al colombiano la nacionalidad venezolana y un título de embajador, al tiempo que luchó sin éxito para evitar su traslado a Estados Unidos.