Los ministros de Exteriores aliados celebrarán el 70 aniversario de la OTAN el 3 y 4 de abril en Washington, la ciudad que fue testigo en 1949 de la firma del Tratado del Atlántico Norte, con las amenazas de Rusia y el terrorismo todavía como sus principales retos.
"Será una oportunidad para celebrar siete décadas de paz y prosperidad para nuestras naciones. Y será una oportunidad para mirar juntos hacia el futuro", indicó este lunes en una rueda de prensa previa a la reunión el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg.
Con motivo de este aniversario, Stoltenberg se entrevistará mañana en la Casa Blanca con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el miércoles se dirigirá al Congreso estadounidense en nombre de los 29 países que forman la Alianza en una sesión a la que estarán invitados sus ministros de Exteriores.
Más tarde, reunidos en el auditorio Andrew Mellon, conmemorarán la firma que originariamente doce países, 70 años atrás, plasmaron para crear la organización, antes de proceder a una reunión el jueves en el Departamento de Estado estadounidense en la que esperan tomar decisiones sobre los retos a los que se enfrenta la Alianza.
El secretario general explicó que ese encuentro empezará con un análisis de la relación con Rusia, que con su "comportamiento agresivo" hacia vecinos como Georgia y Ucrania o su incumplimiento del tratado para la eliminación de armas nucleares de medio y corto alcance (INF, por sus siglas en inglés), "preocupa" a la Alianza.
Stoltenberg aludió a que tomarán "medidas" para mejorar el "conocimiento de la situación en la región del mar Negro -donde Moscú capturó en el estrecho de Kerch en noviembre barcos y marinos ucranianos- con más apoyo a Georgia y Ucrania" mediante la formación de fuerzas marítimas y guardacostas, visitas a puertos, ejercicios y compartir más información.
Sobre el tratado INF, que dejará de tener validez el próximo 2 de agosto ante la salida anunciada de Estados Unidos por el incumplimiento del mismo por parte de Moscú, el político noruego dijo que los ministros aliados volverán a insistir a Rusia en que vuelva a respetarlo.
"Rusia sigue violando el tratado INF desarrollando y desplegando misiles SSC-8. Son difíciles de detectar, rebajan el umbral para usar armas nucleares y hace que estemos todos menos seguros", apuntó.
La OTAN está evaluando qué medidas tomará si el tratado no sobrevive, y aunque Stoltenberg ya ha dejado claro que no van a imitar las acciones de Rusia, abogó por "seguir manteniendo una disuasión y defensa creíbles y eficaces".
Centrados ya en la amenaza terrorista, los ministros repasarán los esfuerzos de Estados Unidos por lograr un acuerdo político en Afganistán, donde las fuerzas de la OTAN están presentes desde el 2003.
"Estamos en Afganistán juntos y tomaremos cualquier decisión sobre nuestra futura presencia juntos", recalcó Stoltenberg, quien se refirió también a la unidad de los aliados en la lucha contra el Estado Islámico.
Aunque los terroristas de ese grupo "ya no retienen ningún territorio", alertó de la importancia de seguir apoyando las capacidades de Defensa de Irak y de formar a fuerzas locales, algo que ya viene haciendo la OTAN en la región, tanto en ese país como en la vecina Jordania o en Túnez.
Por último, los ministros concluirán su reunión hablando de un reparto de cargas más justo en la Alianza, una petición sobre la que Trump ha presionado a los europeos desde que llegó al cargo.
Stoltenberg valoró que, tras años de recortes, los aliados estén ahora "añadiendo millones" a sus presupuestos de Defensa, que han aumentado por cuarto año consecutivo.
Apuntó que "invertiremos más de US$ 260 millones en un proyecto para apoyar a las fuerzas de Estados Unidos en el centro de Polonia", para financiar el almacenamiento y mantenimiento de equipo militar preposicionado.
Este proyecto, señaló, forma parte de los US$ 2,300 millones dedicados por la OTAN a financiar iniciativas de movilidad militar en los últimos cuatro años.
El político noruego reconoció que hay "diferencias" entre los aliados en temas como cambio climático o comercio, pero dijo que "no es la primera vez que las vemos, son parte de nuestra historia desde hace décadas".
"La fuerza de la OTAN consiste en que, pese a estas diferencias, la tarea central es la de protegernos los unos a los otros", concluyó.