Occidente y Rusia están en “caminos totalmente diferentes” pese a llevar una semana inmersos en intensas negociaciones diplomáticas respecto a las tensiones en Ucrania y la seguridad en el este europeo, dijo el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en una entrevista emitida este domingo en la cadena CNN.
“Hay algunos entendimientos entre nosotros. Pero en general, en cuestión de principios, ahora podemos decir que nos mantenemos en diferentes caminos, en caminos totalmente diferentes. Y eso no es bueno. Es perturbador”, dijo Peskov al canal de noticias estadounidense.
Rusia es acusada de haber desplegado unos 100,000 soldados cerca de la frontera con Ucrania, en momentos en que busca que los aliados occidentales se comprometan a que ese país no se una nunca a la alianza atlántica OTAN.
Funcionarios de alto rango de Rusia y Estados Unidos sostuvieron pláticas en Ginebra esta semana pero no hubo grandes avances, y en cambio Washington advirtió al final de la semana que Moscú podría estar preparando una operación encubierta de sabotaje en las próximas semanas como “pretexto” para precipitar una invasión a Ucrania, con el despliegue de agentes entrenados en tácticas de guerrilla urbana.
El gobierno ruso ha sido advertida reiteradamente por las potencias occidentales de las “enormes” consecuencias a las que se enfrentaría en caso de atacar de nuevo Ucrania, aunque estas probablemente se manifiesten como sanciones y no tengan acciones en el ámbito militar.
Al ser preguntado por la posibilidad de que Rusia invada Ucrania, Peskow señaló que cualquier acción militar sería una “locura”.
“Nadie está amenazando a nadie con una acción militar. Sería simplemente una locura hacer eso. Pero estaremos listos para tomar acciones de respuesta”, indicó el funcionario.
“Queremos sentir, desde el principio, la disposición a tomar en cuenta nuestras preocupaciones. Ahora mismo, desafortunadamente, no sentimos eso”, añadió.
Rusia invadió y anexionó la península ucraniana de Crimea en 2014, después de que se produjera una revolución prooccidental en esta antigua república soviética. También es ampliamente considerada como patrocinante militar y financiero de los separatistas prorrusos en guerra con las autoridades ucranianas en el este del país, un conflicto que ha dejado más de 13,000 muertos.