Fundada en el 2017, Innova Funding es una startup financiera que trabaja con las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) para la obtención de financiamiento subastando sus facturas al crédito (factoring).
Algo que la distingue es que se ha posicionado en zonas rurales, en la agroindustria de sierra y selva, donde observan mucho potencial de inclusión financiera digital.
A la fecha han acumulado más de S/ 300 millones en operaciones. Durante el 2020 crecieron 30% versus el año anterior; y en el primer trimestre del 2021 comparado con el mismo periodo del 2020 incrementaron transacciones en 90%, con lo que sus expectativas son favorables.
“Esperamos que en el 2021 se alcance mayor penetración en las regiones y alcancemos un volumen total de S/ 500 millones totales gracias al fortalecimiento de las redes, eficiencias logradas y al aprendizaje de estos casi cuatro años”, señala la CEO de Innova Funding, María Laura Cuya.
El desafío era hacer que las casi 2.4 millones de mipymes peruanas –de las que solo 6% estaban en el sistema financiero— pudieran acceder al financiamiento. Sobre todo porque el 41% de nuevas empresas peruanas cierran antes de cumplir el tercer año y una de las causas es la falta de capital.
A nivel local, esperan este año alcanzar mayor penetración, ya que el desafío rural los ayudó a validar que se puede inyectar liquidez a actores que pasan a facturar para vender más. Asegura que luego de la primera operación de factoring, a las mypes se les abre un mundo de liquidez.
Asimismo, Cuya adelantó que buscarán nuevos horizontes para sus servicios. “Estamos en el momento de consolidar los procesos para la expansión en el 2022 a México y al mercado latino de Estados Unidos, donde los problemas son los mismos y el tamaño de mercado mucho más grande”, dijo.
Funcionamiento
Cuya, con 15 años de experiencia en banca privada, y sus socios Jontxu Pardo (experto en finanzas e innovación) y Alfredo Fuentes (experto en Inteligencia Artificial y tecnología) buscaban hacer el proceso fácil, con cero papeleo.
Primero, la mype se registra en la plataforma y es autorizada a funcionar tras un análisis de riesgo a través de los algoritmos propietarios. Luego el negocio ingresa sus facturas, las que son verificadas y calificadas por su sistema de machine learning para darle el score de riesgo.
Posteriormente, la factura es visible para los inversionistas, los cuales pueden comenzar a hacer ofertas de acuerdo a su interés, mercado, monto, tiempo, etc., mediante un sistema de subasta inversa. La propia empresa decide si cierra la oferta y define al ganador de la subasta.
Como cada inversionista compra de manera individual, el monto de inversión depende de la factura que quiera comprar. “En la plataforma tenemos facturas tanto en soles como en dólares y hemos negociado facturas desde S/ 600 hasta US$ 1′800,000”, señaló Cuya.
Además de factoring, han añadido a la plataforma el servicio de titulización de facturas impagas, y el servicio de cobranza libre para el empresario, que representa el 1% de sus ventas. En pandemia también nació Innova Funding Open Factoring, para habilitar el financiamiento para aliados a través de una API (interfaz).
Sector fintech
Cuya, que también se desempeña como presidenta de la Asociación Peruana de Productos Financieros (Aprofin), mira con optimismo al sector fintech. Sostiene que en tiempos de crisis el empresario peruano está moviéndose hacia líneas de negocio que le funcionan y está descubriendo la liquidez con las facturas.
“Si hoy solo 18,000 empresas hacen factoring queremos llegar al resto que no lo hace. Pensamos que el entorno regulatorio fortalecido, con la nueva ley reglamentada (factoring y ordering) nos va a ayudar a penetrar más en los mercados desatendidos o subatendidos de las mipymes”, refiere.
Cree que las fintech son la oportunidad de canalizar una oferta novedosa que cambie la forma de operar de los microempresarios, y que sea una fuente de oportunidad para el gobierno y un brazo para construir alcance con los sectores más vulnerables.