El Gobierno ruso denunció la “histeria” de Occidente sobre sus supuestos planes de de desplegar infraestructuras militares en Cuba y Venezuela, y sostuvo que ello muestra la “mentalidad arrogante” de Occidente, que piensa que puede hacer todo y Rusia nada.
“Toda una histeria se desató entre los expertos occidentales y el entorno político tras la simple negativa del viceministro ruso de Exteriores Serguéi Riabkov a responder de manera unívoca a una pregunta sobre ‘posibles planes político-militares’ de nuestro país en relación a Cuba y Venezuela”, señaló el Ministerio de Exteriores en un comentario.
Riabkov no descartó en una entrevista al canal de televisión ruso RTVI publicada el pasado día 13 el despliegue de infraestructura militar en Cuba y Venezuela. “No quiero confirmar nada, ni descartar nada”, afirmó el “número dos” de la diplomacia rusa.
A juicio del gobierno de Vladimir Putin, esto es una muestra de la “mentalidad arrogante” de Occidente, que declara la inadmisibilidad de las esferas de influencia, pero que da numerosos ejemplos de aplicación de doble rasero.
“Se puede recordar el reciente llamamiento del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, a las autoridades de Kazajistán a explicar ‘por qué motivo’ recurrió a la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva” (OTSC) liderada por Rusia, señaló Exteriores.
“Acaso no es una demostración de mentalidad arrogante del estilo: ‘nosotros podemos hacer todo, pero Rusia, nada’”, señaló Exteriores.
El posible emplazamiento de estructuras militares rusas en Venezuela y Cuba no fue abordado por el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, y Blinken en la reunión que celebraron este viernes en Ginebra.
“Hoy no tocamos este tema”, dijo el jefe de la diplomacia rusa en una rueda de prensa al término de las conversaciones con su homólogo estadounidense.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, también afirmó que el presidente ruso no abordó la posibilidad de emplazar bases militares en Venezuela durante la conversación telefónica que mantuvo este jueves con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro. “Este asunto particular no se debatió, no se planteó”, dijo Peskov.