Estados Unidos comparte la preocupación de la ONU sobre el debido proceso en el juicio de la expresidenta interina de Bolivia Jeanine Áñez, condenada a diez años de prisión, afirmó el jefe de la diplomacia para América Latina y el Caribe, Brian Nichols.
“Compartimos las preocupaciones de @UNIndepJudges y @UNHumanRights respecto al debido proceso” en el juicio de Jeanine Áñez, afirmó en un tuit refiriéndose al relator de la ONU sobre la independencia de magistrados y jueces y la oficina de Naciones Unidas para los derechos humanos.
Áñez, una exsenadora derechista, fue condenada este mes a diez años de prisión por actos inconstitucionales e incumplimiento de deberes al asumir el mando en noviembre del 2019, dos días después de la renuncia del presidente Evo Morales en medio de protestas.
Sobre la exmandataria pesan otros juicios pendientes por supuesta sedición, terrorismo y alzamiento armado, así como por “genocidio”.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OCNUDH) y la Unión Europea (UE) sostienen que el juicio se vio empañado por vicios procesales.
El Movimiento Al Socialismo (MAS), el partido de Morales y de su delfín, el actual presidente Luis Arce, estima que Áñez violó normas y perpetró un “golpe de Estado” contra el exmandatario izquierdista (2006-2019).
Según Estados Unidos, el sistema judicial boliviano está politizado.
“Las reformas judiciales recomendadas por la @ONU y #GIEI abordarían la preocupante y persistente politización judicial”, añadió Nichols en el tuit, mencionando al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes creado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Tanto la ONU como el grupo de expertos pidieron una mayor autonomía del poder judicial y de la fiscalía.