La evidencia científica no justifica la clasificación del controvertido y ampliamente utilizado herbicida glifosato como cancerígeno, dijo el martes la Agencia Europea de Sustancias Químicas (ECHA, por sus siglas en inglés).
Actualmente, el glifosato se clasifica como causante de “daño ocular” y “tóxico para la vida acuática”. No obstante, es uno de los herbicidas más utilizados en el mundo.
“El Comité de Evaluación de Riesgos de la ECHA formó su opinión científica independiente, la clasificación actual del glifosato no cambia”, dijo a AFP Mike Rasenberg, Director de Evaluación de Riesgos de la ECHA.
“Basado en una amplia revisión de la evidencia científica, el comité concluye nuevamente que clasificar el glifosato como cancerígeno no está justificado”, dijo la agencia en un comunicado.
El uso de este controvertido herbicida está autorizado en la Unión Europea hasta el 15 de diciembre del 2022. La Comisión analiza si se renovará el permiso.
En marzo del 2015, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer de la Organización Mundial de la Salud clasificó al glifosato como “probablemente cancerígeno para los humanos”.
Las organizaciones de agricultores se oponen a los llamados para prohibir la sustancia y citan la falta de alternativa.