El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en un evento en la Casa Blanca luego del escándalo por sus afirmaciones sobre Haití y África.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en un evento en la Casa Blanca luego del escándalo por sus afirmaciones sobre Haití y África.

El embajador de Estados Unidos en Suiza, Edward T. McMullen, dijo hoy que no hay ninguna contradicción en el hecho de que el presidente de su país, Donald Trump, acuda al Foro Económico Mundial, que ha criticado previamente, y defienda el proteccionismo.

McMullen, quien dirigió la campaña de las primarias de Trump en Carolina del Sur, afirmó en una entrevista al diario francófono "Le Temps" que la presencia del presidente estadounidense en Davos los próximos 25 y 26 de enero "es una ocasión única para explicar que el concepto 'Estados Unidos primero' no significa 'Estados Unidos solo' en el mundo".

Trump, dijo McMullen, podrá explicar a los otros 69 jefes de Estado y de Gobierno y a la audiencia global interesada en el discurso que pronunciará el día 26 "las oportunidades que su política puede ofrecer a sus socios europeos e internacionales".

En opinión de McMullen, algunos "no comprenden bien" la estrategia de Trump, por lo que Davos, un foro que defiende el libre comercio y la globalización, será una buena oportunidad para que los medios internacionales, la comunidad económica, el mundo político, las esferas políticas y académicas escuchen las razones detrás de su política "sin filtro mediático".

McMullen también señaló que hay un análisis "sesgado" del "EE.UU. primero" de Trump facilitado por los medios, porque la visión del presidente "es que el libre comercio es fundamental para el éxito de EE.UU.", pero para ello debe haber intercambios de bienes y servicios "correctos y equilibrados".

Ello requiere un "reequilibrio de los acuerdos que han beneficiado demasiado a una parte en los últimos años en detrimento de EE.UU.", explicó el embajador, quien puso como ejemplo los acuerdos con Corea del Sur o el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

"El objetivo de Donald Trump es asegurar que los EE.UU. no estén en una posición de debilidad. No tiene la intención de dar a su país una ventaja discriminatoria", recalcó McMullen.