El mercado de traspasos que acaba este 31 de agosto pasará a la historia como el periodo en el que el fútbol español dijo adiós al argentino Lionel Messi. Una estrella, quizás la mayor de la historia del Barcelona, abandona LaLiga Santander, que apura las últimas horas para resolver el culebrón del francés Kylian Mbappé (PSG), cuyo fichaje ambiciona el Real Madrid.
La salida de Messi es, sin duda, el gran movimiento de este mercado de fichajes. El delantero argentino, quizás el mejor jugador que se enfundó la camiseta azulgrana en los 121 años de historia del Barcelona, tuvo que salir de un club que no podía retenerle por problemas “económicos y estructurales” que hacían inviable pagar su salario aún bajando sus emolumentos a la mitad, según reconocieron Joan Laporta y el propio Messi.
“Este año estaba convencido de que iba a seguir aquí, en casa”, señaló el astro argentino el 8 de agosto en su despedida, marcando la diferencia con la temporada anterior, cuando anunció su intención de irse con un burofax pero finalmente se quedó. Dos días después aterrizó en París para firmar un contrato con el PSG, y el domingo 29 debutó ante el Reims, sustituyendo a su amigo Neymar Junior en el minuto 66.
Antes de la dolorosa salida del ‘10’, el Barcelona había acordado las llegadas del delantero argentino Sergio Agüero -inscrito tras las bajadas de sueldo de Sergio Busquets y Jordi Alba- y el central Eric García, ambos llegados del Manchester City con la carta de libertad; y el delantero neerlandés Memphis Depay, también libre y procedente del Olympique Lyon francés.
De Can Barça salieron Illaix Moriba (Leipzig), Junior Firpo (Leeds), el francés Jean-Clair Todibo (Niza) y Carles Aleñá (Getafe), y el club busca destinos para varios jugadores antes del cierre del mercado.
En la pugna de los grandes del fútbol español con el PSG, el Real Madrid ambiciona la llegada de Kylian Mbappé, que el pasado domingo marcó dos goles al Reims en el debut de Messi y actualmente se encuentra concentrado con la selección francesa. Según el diario francés L’Equipe, el conjunto blanco llegó a ofrecer 200 millones de euros por él.
El conjunto de la capital parisina no solo se llevó al capitán y máximo estandarte del Barcelona. También hizo lo propio con el del Real Madrid, Sergio Ramos, que finalizó su etapa de 16 temporadas en el club blanco el 30 de junio, después de no llegar a un acuerdo para renovar por la duración del siguiente contrato, ya que el club ofrecía un año y Ramos pretendía firmar dos.
El defensor sevillano dio su versión del desacuerdo el 17 de junio. “En las últimas conversaciones acepto la oferta con la bajada de salario y se me dice que ya no hay oferta... No sé por qué caducó la oferta”, explicó entonces. El 8 de julio acordó su fichaje por el PSG para las próximas dos temporadas. No ha debutado por lesión.
También tomaron la puerta de salida del Real Madrid el central francés Raphael Varane, rumbo al Manchester United inglés por 40 millones, y el noruego Martin Odegaard se quedó en el Arsenal a cambio de 35.
También se especula con la llegada del centrocampista galo Eduardo Camavinga (Rennes), pero hasta el momento la única contratación acometida por el club blanco fue la del central austríaco David Alaba (Bayern Múnich), además de los retornos tras cesión de Gareth Bale (Tottenham), Dani Ceballos (Arsenal) o Luka Jovic (Eintracht Frankfurt).
Atlético y Sevilla invierten para apuntalar sus plantillas
El vigente campeón de LaLiga Santander, el Atlético de Madrid, fue de los pocos equipos que invirtió para incorporar: unos 65 millones entre el centrocampista argentino Rodrigo de Paul (Udinese) y el delantero brasileño Matheus Cunha (Hertha de Berlín). También llegó el portero francés Benjamin Lecomte, cedido por el Mónaco, y el brasileño Marcos Paulo (Fluminense), libre, enviado a préstamo al Famalicao portugués.
Activo como cada verano en el mercado estival, el Sevilla reforzó cada línea, con el portero serbio Marko Dmitrovic (Eibar); defensas como el argentino Gonzalo Montiel (River Plate) y el sueco Ludwig Augustinsson (Werder Bremen); centrocampistas como el danés Thomas Delaney (Borussia Dortmund) y el argentino Erik Lamela (Tottenham), y el ariete Rafa Mir (Wolverhampton). Todo por menos de 40 millones. Del Ramón Sánchez Pizjuán salió Bryan Gil al Tottenham, por 25 millones y con la llegada de Lamela como parte del pago.
El resto de equipos optaron por recambios escogidos y fichajes a coste cero: el Betis se llevó al portero luso Rui Silva (libre del Granada) y a Willian José (cedido por la Real Sociedad), y a su vez cedió a Loren Morón al Espanyol; mientras que al Granada llegaron los colombianos Carlos Bacca (Villarreal, libre) y Santiago Arias (cedido por el Atlético) y el portero portugués Luis Maximiano (Sporting Portugal).
Tras asegurar brillantemente su continuidad en la máxima categoría del fútbol español, el Cádiz firmó al paraguayo Santiago Arzamendia (Cerro Porteño), al chileno Tomás Alarcón (O’Higgins) y se quedó en propiedad al meta argentino Jeremías ‘Conan’ Ledesma (Rosario Central), mientras que consiguió el retorno del delantero hispanorumano Florin Andone a LaLiga, cedido por el Brighton inglés.
El Valencia de José Bordalás no tendrá muchas piezas nuevas: el delantero brasileño Marcos André (Valladolid), el lateral francés Dimitri Foulquier (Granada) y el central paraguayo Omar Alderete (cedido por el Hertha de Berlín alemán) son las más destacadas de un equipo que ha perdido a Kevin Gameiro (Estrasburgo) y Kang-in Lee (Mallorca).
Por su parte, el Getafe obtuvo en este mercado una de sus mayores ventas de su historia, la de Marc Cucurella al Brighton inglés por 18 millones de euros. Antes se había reforzado con el interior checo Jakub Jankto (Sampdoria), Víctor Machín ‘Vitolo’ (cedido por el Atlético), Carlos Aleñá (Barcelona) o Sandro Ramírez (Huesca).
Con el objetivo de asentarse tras la permanencia, el Elche ha sumado refuerzos de relumbrón con los préstamos del portero Kiko Casilla (Leeds) y el delantero argentino Darío Benedetto (Marsella); además de la llegada de Lucas Pérez (Alavés), Omar Mascarell (Schalke 04) y el colombiano Johan Mojica (Granada).
El Mallorca retorna a Primera con el retorno del japonés Take Kubo, de nuevo cedido por el Real Madrid, al que se suma el canterano valencianista Kang-In Lee (libre) y el del Villarreal Fer Niño (cedido). Ángel Rodríguez (Getafe) y Jaume Costa (Villarreal) pondrán la experiencia tras llegar libres, mientras que el croata Ante Budimir se quedará en Osasuna, traspasado por 8 millones.
Para los otros dos ascendidos, los movimientos han sido limitados o a coste cero: el Espanyol ha fichado al delantero belga Landry Dimata (Anderlecht), Sergi Gómez o Aleix Vidal (Sevilla); y el Rayo Vallecano a Randy Nteka y Pathé Ciss (Fuenlabrada) o las cesiones de Martín Merquelanz y Kévin Rodrígues (Real Sociedad), tras la salida del internacional peruano Luis Advíncula (Boca Juniors).