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Las ventas minoristas en Estados Unidos se estancaron inesperadamente en abril porque se desvaneció el impulso de los cheques del gobierno, pero es probable que haya una aceleración en los próximos meses por el ahorro récord y la reapertura de la economía.
El informe del Departamento de Comercio del viernes también mostró que las ventas minoristas de marzo fueron mucho más sólidas de lo que se había estimado, lo que sitúa el gasto de los consumidores en una senda de mayor crecimiento para el segundo trimestre.
Además, hubo indicios de que los estadounidenses estaban empezando a desplazar su gasto desde los bienes a los servicios, como restaurantes y bares, cuando más de un tercio de la población ya está vacunada contra el COVID-19.
“Habrá un impulso en el segundo trimestre para el crecimiento económico porque las ventas se salieron de lo normal en marzo”, dijo Chris Rupkey, economista jefe de FWDBONDS en Nueva York.
La lectura sin cambios de las ventas minoristas del mes pasado siguió a un aumento del 10.7% en marzo, el segundo mayor incremento en los registros y una revisión al alza desde el 9.7% comunicado antes.
Economistas encuestados por Reuters habían pronosticado que las ventas al por menor aumentarían un 1%. En términos interanuales, el aumento fue de un 51.2%.
Los estadounidenses vacunados están frecuentando restaurantes y bares después de haber estado encerrados en casa durante más de un año.
Los hogares han acumulado al menos US$ 2,3 billones en exceso de ahorros durante la pandemia de coronavirus, lo que debería apuntalar el gasto este año.
“Vamos a ver cómo cada vez más personas cambian una mayor proporción de su gasto desde las ‘cosas’, que se registran en las ventas minoristas, hacia las ‘experiencias’, que se reflejan en un gasto de consumo más amplio”, dijo James Knightley, economista jefe internacional de ING.
Muchos hogares que cumplían los requisitos recibieron cheques de US$ 1,400 en marzo, que formaban parte del paquete de rescate de la Casa Blanca por valor de US$ 1,9 billones aprobado a principios de ese mes.
Algunos economistas dijeron que el informe neutral de las ventas minoristas podría aliviar las preocupaciones de los mercados financieros sobre la inflación, que fueron avivadas por reportes de esta semana que mostraron fuertes aumentos de los precios al consumidor y al productor en abril.
Fuerte impulso
Excluyendo los automóviles, la gasolina, los materiales de construcción y los servicios alimentarios, las ventas al por menor cayeron 1.5% el mes pasado, tras un aumento revisado al alza de 7.6% en marzo.
Las llamadas ventas minoristas subyacentes son las que más se corresponden con el componente de gasto de los consumidores del Producto Bruto Interno. Antes se estimaba que se habían disparado un 6.9% en marzo.
Otro informe separado de la Reserva Federal mostró el viernes que la producción manufacturera aumentó moderadamente en abril, pese a una disminución de la fabricación de vehículos de motor por la escasez mundial de semiconductores.