Por Narayana Kocherlakota
Una manifestación de racismo estructural en Estados Unidos es que los negros deben tener grados académicos muy superiores para acceder a roles de liderazgo. Lamentablemente, la Reserva Federal de EE.UU. no es la excepción.
Es el caso de los gobernadores de la Fed, las personas encargadas de la política monetaria en el banco central más poderoso del mundo. En más de un siglo, solo tres de ellos han sido negros: Andrew Brimmer, Emmett Rice y Roger Ferguson.
Sus certificaciones académicas eran extraordinarias. Brimmer recibió una maestría en economía de la Universidad de Washington y un doctorado en economía de la Universidad de Harvard. Rice tenía un MBA del City College de Nueva York y un doctorado en economía de Berkeley.
Ferguson tenía un doctorado en economía y un título en derecho, ambos de Harvard. Todos tenían amplias experiencias profesionales que proporcionaron una sólida base para sus complejos trabajos de liderazgo en la Fed.
La gente blanca, por el contrario, regularmente asciende al cargo de gobernador de la Fed con grados académicos mucho más básicos. Solo dos de los cinco gobernadores actuales -todos blancos- tienen un doctorado en economía y otros dos no tienen ningún título de economía.
Hay una disparidad similar en el nombramiento de los presidentes de los 12 bancos regionales de la reserva, proceso que supervisan los gobernadores. En el 2017, Raphael Bostic se convirtió en el primer presidente regional de raza negra, en la Fed de Atlanta.
Tiene títulos universitarios en psicología y economía de Harvard, un doctorado en economía de Stanford y ha ocupado una larga lista de importantes cargos en el ámbito académico y de política pública, lo que lo convierte en uno de los profesionales más distinguidos en ocupar ese cargo.
En contraste, solo en los últimos cinco años, cuatro hombres no negros sin doctorado en economía se han convertido en presidentes regionales.
Para ser claros, no estoy diciendo que la Fed deba elevar el estándar para los candidatos blancos. Las personas sin títulos en economía pueden ser grandes autoridades de la Fed, como lo ha demostrado el presidente Jerome Powell.
Me refiero a que muchas personas negras con grados académicos similares pueden ser sobresalientes líderes de la Fed. La evidencia sugiere que el proceso de designación excluye sistemáticamente a estos candidatos.
¿Cómo ocurre esta exclusión? En cada contratación o nombramiento, quienes toman las decisiones necesariamente sopesan los aspectos “intangibles” de los candidatos, esto es, atributos cruciales, como el conocimiento de la forma en que una persona trabaja con los demás, que no se reflejan directamente en sus títulos o experiencia.
La evidencia sugiere que, en el caso de la Fed, quienes toman las decisiones -que son en gran parte blancos- están dando a los candidatos no negros más crédito por tales cualidades extraoficiales. Simplemente incluir y confiar en más voces negras en el proceso podría ayudar a corregir este sesgo.
A decir verdad, puede haber otros sesgos sistemáticos en la contratación y nombramientos de la Fed; todos ellos deben ser corregidos. La injusticia debe terminar.