La política monetaria no puede hacer mucho para resolver el “rompecabezas” del mercado laboral, donde las empresas tienen dificultades para encontrar trabajadores pese a que millones de estadounidenses siguen desempleados, dijo el presidente de la Reserva Federal (Fed) de Dallas, Robert Kaplan.
El funcionario, en tanto, repitió su opinión de que la Fed debería reducir su apoyo para la economía “más temprano que tarde”.
La gente “necesita más incentivos para volver a su trabajo”, dijo Kaplan en un evento virtual realizado por la Universidad de Rice, en el que agregó que la disponibilidad de beneficios por desempleo debido a la pandemia da a los trabajadores la opción de esperar un mejor puesto laboral en lugar de aceptar lo que se ofrece.
Eso crea un desequilibrio entre la demanda y la oferta de mano de obra que la Fed no está preparada para abordar. “Cuando se acaben las prestaciones por desempleo, encontraremos un equilibrio”, destacó.
Respaldarán recuperación robusta
Por su parte, el vicepresidente de la Fed, Richard Clarida, señaló que la respuesta de la Fed a la crisis del COVID-19, que incluyó herramientas probadas y otras nuevas, ayudó a compensar el golpe sin precedentes a la economía estadounidense en el 2020 y continuará reforzándola este año.
En un artículo académico que resumió la respuesta pandémica de la Fed pero no dio demasiados detalles a futuro, las acciones de política fiscal y monetaria tomadas desde marzo del 2020 “no tienen precedentes en su escala, alcance y velocidad”.
La Fed redujo las tasas a casi cero, compró billones de dólares en bonos del Tesoro y valores respaldados por hipotecas, y prometió mantener su política monetaria sin cambios durante un periodo que podría durar años.
También puso en marcha medidas de emergencia de liquidez y financiación para evitar turbulencias en los mercados monetarios, al igual que una serie de nuevas facilidades crediticias para hogares y empresas. Además, modificó las reglas y las prácticas de supervisión para alentar a los bancos a seguir otorgando préstamos.
“Estas medidas brindaron un apoyo crucial a la economía en el 2020 y continúan contribuyendo a lo que se espera sea una sólida recuperación económica en el 2021”, escribieron Clarida y sus coautores en un documento que relata meticulosamente esas medidas, muchas de las cuales ya se han puesto en marcha o lo serán pronto.
Sin embargo, el documento no abordó ningún problema importante de política monetaria para el futuro, incluido por cuánto tiempo más la Fed seguirá comprando bonos a su ritmo mensual actual de US$ 120,000 millones.