Las familias estadounidenses continuaron tomando deuda, en parte para enfrentar precios disparados, señaló un reporte de la Reserva Federal (Fed) de Nueva York publicado este martes, que muestra que los casos de impagos están aumentando.
En medio de la mayor inflación en cuatro décadas, el informe muestra que los balances de las tarjetas de crédito en el período abril-junio subieron a un máximo en 20 años.
La deuda total de los hogares aumentó 2% en el segundo trimestre del año sobre igual período del año pasado, y supera los niveles previos a la pandemia.
Aunque las finanzas de las familias están en buena forma por ahora -gracias a ayudas federales y la suspensión de los desalojos por falta de pago-, los investigadores de la Fed advierten que la era de la morosidad históricamente baja está llegando a su fin.
“El segundo trimestre del 2022 mostró un fuerte incremento en hipotecas, créditos automotores y balances de tarjetas de créditos impulsados en parte por precios en aumento”, dijo Joelle Scally, del Centro de Datos Macroeconómicos de la Fed de Nueva York.
“Estamos viendo más impagos entre consumidores de bajos ingresos” o con historial de crédito débil, “con tasas (de moratoria) que se acercan a los niveles prepandémicos”, añadió.
De todos modos, los niveles de impagos siguen bajos. Pero deberían aumentar una vez que se termine la suspensión de los desalojos por falta de pago de hipotecas.
La deuda total de las familias en Estados Unidos aumentó US$ 312,000 millones en el trimestre a US$ 16.15 billones, y el componente más importante -el de las hipotecas- subió US$ 207,000 millones para colocarse cerca de los US$ 11.4 billones, indica el informe.
Sin embargo, el número de nuevos créditos hipotecarios bajó, en medio de una escalada de las tasas de interés por parte de la Fed, que busca enfriar la economía para combatir la inflación.
En tanto, los saldos en las tarjetas de crédito y créditos para compra de autos crecieron por un incremento de precios.