El presidente de los EE.UU., Donald Trump, se quita la mascarilla protectora mientras posa sobre el Balcón Truman de la Casa Blanca después de regresar de ser hospitalizado en el Centro Médico Walter Reed. (REUTERS/Erin Scott).
Donald Trump

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, enfermo de COVID-19, se quitó la máscara y levantó el pulgar al llegar el lunes por la noche a la Casa Blanca tras ser dado de alta del hospital donde permaneció los últimos tres días.

El mandatario, de 74 años, regresó a la Casa Blanca en helicóptero desde el hospital militar Walter Reed en las afueras de Washington, poco después de anunciar en Twitter su intención de reanudar “pronto” su campaña para un segundo mandato.

Unos minutos antes, de tapaboca y traje y corbata, el mandatario había abandonado caminando el centro médico previo a entrar en un vehículo negro y luego en el Marine One en medio de los gritos de “¡Cuatro años más!, ¡Cuatro años más!” de sus seguidores apostados en la entrada.

“¡Volveremos pronto a la campaña!”, había tuiteado poco antes Trump. “Las noticias falsas solo muestran las encuestas falsas”, dijo.

En la recta final de una tensa carrera por la Casa Blanca el mandatario republicano aparece rezagado en las encuestas nacionales por más de ocho puntos porcentuales frente a su rival demócrata, el exvicepresidente Joe Biden, según el promedio de las plataformas RealClearPolitics y FiveThirtyEight.

Trump fue hospitalizado el viernes horas después de dar positivo en la prueba de coronavirus. El lunes anunció que sería dado de alta a las 18:30 (22H30 GMT) para continuar su tratamiento en la Casa Blanca.