La Reserva Federal (Fed) podría aumentar las tasas de interés a partir de marzo y ahora está en una “buena posición” para tomar medidas aún más agresivas contra la inflación si fuera necesario, declaró el presidente de la Fed de St. Louis, James Bullard.
El banco central acordó en diciembre poner fin a sus compras de activos en marzo y sentó las bases para el inicio de los aumentos de tasas que todos los responsables de la política monetaria, incluso los más moderados, ahora consideran apropiados en el 2022.
La Fed “está en una buena posición para tomar medidas adicionales según sea necesario para controlar la inflación, lo que incluye permitir una liquidación pasiva del balance general, aumentar la tasa de referencia y ajustar el momento y el ritmo de las alzas subsiguientes de la tasa de referencia”, dijo Bullard.
Se podría aprobar un aumento inicial de tasas “en la reunión de marzo. Los aumentos de tasas posteriores durante el 2022 podrían adelantarse o retrasarse dependiendo de la evolución de la inflación”, señaló.
Las proyecciones emitidas en diciembre mostraron que la mitad de los funcionarios de la Fed esperan que este año se necesiten aumentos de tasas de un cuarto de punto porcentual.
La inflación ahora es más del doble del objetivo de 2% de la Fed, y Bullard indicó que el “choque” inflacionario experimentado por el país significa que el banco central debería poder satisfacer sus objetivos durante varios años.
El cambio de política de diciembre se produjo justo cuando la variante ómicron del coronavirus comenzaba a aumentar las tasas diarias de infección. Pero Bullard agregó que no cree que la ola actual de casos desviaría a la economía estadounidense o a la Fed.
Se acerca a los dos objetivos
La presidenta de la Reserva Federal de San Francisco, Mary Daly, dijo que la economía de Estados Unidos se está “acercando” a los dos objetivos del banco central de pleno empleo y 2% de inflación, al menos a corto plazo.
“Hay una diferencia a corto y largo plazo... equilibrar esas cosas a medida que avanzamos en el 2022 será el punto crítico de cuestión para la política monetaria”, declaró Daly en un evento virtual del Banco de Irlanda.
Si bien el mercado laboral “parece ser muy fuerte”, afirmó, la economía está soportando millones de empleos menos que antes de la pandemia, ya que las mujeres y los trabajadores mayores se mantienen fuera de la fuerza laboral debido a las limitaciones provocadas por el COVID-19.