A punto de cumplirse 20 años del ingreso de China en la Organización Mundial del Comercio (OMC), ese país ha usado esa membresía para erigirse como el mayor exportador global, pero sigue sin desmantelar prácticas comerciales incompatibles con el libre mercado, aseguró la delegación de Estados Unidos ante el organismo.
“Los miembros de la OMC esperaban que China desmontase para siempre esas políticas y prácticas, pero esa expectativa no se ha cumplido, ni parece que China tenga intención de cambiar”, destacó hoy el encargado de negocios de la delegación de Estados Unidos ante la organización, David Bisbee.
“En lugar de ello, China ha usado la licencia que le da ser miembro de la OMC para convertirse en el mayor comerciante de la organización, manteniendo una postura estatista y no de libre mercado, para perjuicio de trabajadores y empresas de Estados Unidos y otros países”, aseguró el diplomático.
Estas críticas se lanzaron en la revisión periódica de las prácticas comerciales de China, en la OMC, donde otros miembros también expresaron su preocupación por ciertas prácticas del gigante asiático, entre ellos Japón o Australia, aunque las principales críticas provinieron de la parte estadounidense.
Según Bisbee, las políticas más controvertidas del régimen comunista son las industriales, que “van mucho más allá de apoyar a las empresas nacionales” y en realidad “distorsionan el terreno de juego en perjuicio de los productos y servicios importados”.
Entre esas políticas dañinas según Estados Unidos figuran desde los “fuertes subsidios que causan una grave y persistente sobrecapacidad” a tratamientos preferentes a empresas chinas, restricciones de información, o inadecuada aplicación de las leyes de propiedad intelectual.
“Tampoco podemos ignorar informaciones que acusan a China de uso de mano de obra forzada en diversos sectores”, así como de la “coacción económica” que Pekín ejerce contra los miembros de la OMC que critican la política comercial del país asiático en el seno de esta organización.
Bisbee subrayó que Estados Unidos ha abierto en estas dos décadas 27 disputas comerciales contra China en el seno de la OMC, “ganando en todos los casos que se han cerrado”, aunque lamentó que Pekín no haya cambiado en muchos casos las malas prácticas que habían sido denunciadas en esos contenciosos.