(AFP) Luego de la adopción en la Unión Europea (UE) de nuevas leyes de protección de datos, el debate sobre la privacidad se intensifica en Estados Unidos, con algunas voces pidiendo medidas similares a las tomadas por los europeos y otras advirtiendo que las reglas podrían fracturar a la internet global.
Las firmas tecnológicas estadounidenses, y prácticamente todas las compañías con operaciones en línea, deberán cumplir con las reglas si sus sitios se usan en la Unión Europea, o de lo contrario enfrentarán fuertes sanciones financieras.
Algunas empresas estadounidenses, incluidos sitios de noticias como Los Angeles Times y New York Daily News, bloquearon el acceso en la UE porque eran incapaces de cumplir con el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), que entró en vigencia este viernes.
Otros sitios web estadounidenses se han cerrado por completo, y algunos han contratado consultores para que los ayuden a bloquear el acceso desde Europa.
Las grandes empresas de tecnología de Estados Unidos se han comprometido a cumplir las normas de la UE y en muchos casos han prometido extender las mismas protecciones en todo el mundo. Pero Google y Facebook ya han sido acusados de no acatar la nueva ley.
¿Por qué no en EEUU?
Algunos activistas argumentan que la implementación del RGPD ofrece la oportunidad de brindar más beneficios de privacidad y protección de datos a los estadounidenses.
"No vemos ninguna razón por la cual las compañías estadounidenses, mientras luchan por cumplir con las nuevas políticas europeas, no pueden extender el estándar RGPD a los consumidores estadounidenses", dijo Katharina Kopp, del Centro para la Democracia Digital, uno de los 28 grupos activistas que firmaron una carta en ese sentido remitida a las principales empresas internacionales del sector.
El senador Ed Markey y otros tres legisladores presentaron una resolución esta semana que solicitaría a las compañías ofrecer en Estados Unidos las mismas protecciones de la ley europea.
"El pueblo estadounidense se preguntará por qué están recibiendo protecciones de privacidad de segunda clase", dijo Markey.
La ley establece el principio clave de que los individuos deben otorgar un permiso explícito para que se usen sus datos, y da a los consumidores el derecho de saber quién está accediendo a su información y para qué.
En caso de infracciones, las empresas pueden recibir una multa de hasta 20 millones de euros (US$ 24 millones) o el 4% de su facturación mundial.
Confuso y complicado
Los críticos del RGPD argumentan que la ley es confusa y complicada, y que podría dar lugar a efectos indeseados a ambos lados del Atlántico.
Daniel Castro, de la Fundación de Tecnología de la Información e Innovación, un think tank de Washington, calificó al RGPD como "un conjunto de reglas confusas y poco prácticas" que ofrece pocos beneficios a los usuarios.
"En lugar de contratar ingenieros, las empresas están contratando abogados de privacidad", escribió Castro en blog.
Ryan Radia, del Competitive Enterprise Institute, dijo que aunque el RGDP apuntaba a las grandes firmas de Internet, es probable que termine fortaleciendo el control que ya tienen.
"Esto dará como resultado una mayor concentración del mercado, ya que las pequeñas y nuevas empresas tendrán dificultades para cumplir con la mayor carga de costos regulatorios", opinó Radia.
Amy Webb, miembro de la Fundación Nieman de Harvard y fundadora del Future Today Institute, advirtió que la nueva ley podría conducir a una "splinternet" (una internet dividida) con diferentes tipos de datos disponibles en varias regiones del mundo, y podría ser particularmente engorrosa para los medios de noticias.
"Es plausible que en una década nos encontremos atrapados en una nueva brecha digital, donde muchas 'splinternets' distintas se comporten y funcionen de manera diferente, dependiendo desde qué lugar del mundo se accede a la red", dijo en un blog esta semana.
Webb agregó que las organizaciones de noticias podrían encontrarlo especialmente difícil de cumplir debido a la necesidad de consentimiento para organizar las transmisiones y promover contenido.
"El modelo de negocio para las noticias, ya débil, podría debilitarse aún más", auguró.
Henry Farrell, profesor de la Universidad George Washington, afirmó que todo el modelo comercial del sector tecnológico podría estar en riesgo por el RGPD.
"Este es un ataque fundamental" al modelo basado en "proporcionar servicios a individuos mientras observan su comportamiento y alimentan el acceso o los datos a los anunciantes", tuiteó Farrell.