Tres cumbres consecutivas a lo largo de la próxima semana pondrán a prueba la determinación de Occidente de apoyar a Ucrania y el alcance de la unidad internacional, mientras las crecientes tensiones geopolíticas y el costo económico proyectan una sombra cada vez más alargada.
Los líderes de la Unión Europea (UE) se reunirán en Bruselas el jueves y viernes, para considerar oficialmente hacer de Ucrania un candidato para membresía. De domingo a martes, el Grupo de las Siete principales potencias económicas celebrará su cumbre anual en Alemania. Inmediatamente después, los líderes de la OTAN se reunirán en Madrid, con un enfrentamiento interno sobre las solicitudes de membresía de Finlandia y Suecia.
Las 27 naciones de la UE parecen estar en camino de darle a Ucrania un impulso moral muy necesario frente a la invasión de las tropas rusas. Sin embargo, en la cumbre de la OTAN, parecen inciertas las perspectivas de que los países rompan la oposición de Turquía a la membresía de los países nórdicos, en el mejor de los casos.
Entre ambos encuentros, el canciller alemán Olaf Scholz espera convocar a un frente unido en apoyo a largo plazo para Ucrania, la lucha contra el cambio climático y el hambre mundial en un momento de inflación descontrolada y aumento de inseguridad sobre el abasto del combustible cuando dé la bienvenida en los Alpes bávaros a los líderes del G7: Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido, además de la UE.
“Ahora es el momento en que (aquellos) de todo el mundo que defienden la democracia y la libertad, los derechos humanos y la sociedad liberal deben unirse”, dijo Scholz antes de las tres cumbres.
“La libertad tiene su precio, la democracia tiene su precio, la solidaridad con amigos y socios tiene su precio, y estamos preparados para pagar ese precio”, aseguró, reconociendo que las sanciones contra Rusia también están causando problemas en casa. El apoyo a Ucrania continuará “mientras Ucrania necesite nuestro apoyo”, agregó.
En cuanto a la cumbre de la UE, parece seguro que Ucrania se volverá candidato para integrarse, después de las dudas iniciales entre algunos miembros sobre un avance tan rápido. La Comisión Europea, el brazo ejecutivo del bloque, recomendó el paso la semana pasada, poco después de que los líderes de Alemania, Francia, Italia y Rumania visitaran Kiev y respaldaran su oferta.
Según varios diplomáticos de la UE que hablaron bajo condición de anonimato sobre las conversaciones a puerta cerrada antes de la cumbre, Ucrania recibirá la aprobación unánime requerida.
“Daremos una dirección muy clara”, reveló un diplomático. “Será un poco como un compromiso antes del matrimonio”.