Largas filas de jubilados y beneficiarios de la seguridad social se formaron este viernes frente a los bancos en Argentina, en el primer día de atención pública exclusivo desde que el 20 de marzo se decretó el aislamiento social obligatorio por el nuevo coronavirus.
Los jubilados, el sector más vulnerable y con recomendación de quedarse en sus casas, son también los más reacios a manejarse con tarjetas de débito y es muy habitual que prefieran cobrar en efectivo y por ventanilla.
“Es una situación extraordinaria y muy compleja. Quizás hay mucha gente que tiene experiencia de otras crisis y tuvo miedo de no llegar a tiempo. Tratamos de facilitar lo más posible. No esperábamos tanta afluencia de público”, declaró Alejandro Vanoli, titular de la Administración de Seguridad Social al canal de noticias TN.
La gente se agolpó desde la madrugada frente a las entidades bancarias por la urgencia de tener dinero en sus bolsillos, pese a que los bancos seguirán abiertos en los próximos días.
Además de quienes debían cobrar por cronograma de pagos, se sumaron quienes tenían cobros pendientes del mes anterior, quienes necesitan retirar su tarjeta de débito para evitar futuras filas, y nuevos beneficiarios de subsidios, explicó Vanoli.
Frente a la aglomeración que se repitió en distintos puntos del país, las autoridades del Banco Central anunciaron que las entidades abrirán también este sábado y domingo.
Los bancos están cerrados al público desde el 20 de marzo, cuando el presidente Alberto Fernández declaró el aislamiento social obligatorio en forma preventiva para moderar la curva exponencial de contagios del Covid-19.
En principio, la cuarentena regirá hasta el próximo 13 de abril.
En Argentina ascienden a 1,265 los contagiados, de los que 37 fallecieron, según el último reporte oficial de la mañana de este viernes.