Chile anunció la flexibilización de las medidas sanitarias impuestas debido al coronavirus para entrar o salir del país, eliminando la prueba PCR, luego que el fin de semana anunciara la reapertura de fronteras terrestres con Argentina, Bolivia y Perú.
Se implementarán tres niveles de alerta para el ingreso a Chile, que se determinarán con base en la circulación internacional o local de nuevas variantes del virus.
Desde este jueves gran parte de Chile entrará en el llamado “alerta nivel 1″ o de bajo impacto sanitario, según explicó Cristóbal Cuadrado, subsecretario de Salud Pública.
En la alerta 1, se asume un escenario de transmisión comunitaria de las variantes ya conocidas y controladas.
“En esta alerta no hay restricción para los viajes que entran o salen del país y la homologación de vacunas para los viajeros será voluntaria. Asimismo, el testeo previo al viaje es solo recomendado, pero al llegar a Chile podrán ser testeados de forma aleatoria”, de acuerdo con el Ministerio de Salud.
Todos los pasajeros deberán llenar un formulario sanitario y, en el caso de los extranjeros no residentes, deberán traer también un seguro de salud que cubra el contagio de COVID-19, y se hará un testeo aleatorio en el ingreso al país.
“La idea es minimizar el riesgo de cambio en la situación epidemiológica nacional por la emergencia de nuevas variantes en particular las variantes de preocupación definidas por la Organización Mundial de la Salud” (OMS), agregó Cuadrado.
Antes, para ingresar a Chile se requería un test PCR negativo, tomado antes de 72 horas del viaje.
Cuadrado indicó que se subirá a la alerta 2 cuando aparezca una variante nueva y se “incrementará la prevención y control”.
Bajo la alerta 3, que es la máxima, se volverán a imponer todas las restricciones.
La flexibilización de medidas se produce luego que Chile anunció que el próximo 1 de mayo se reabrirán las fronteras terrestres que aún estaban cerradas.
Desde el 22 de diciembre están abiertos cinco pasos fronterizos con Argentina. En noviembre, se abrió el aeropuerto de Santiago y luego los terminales de las ciudades de Antofagasta e Iquique (norte) y Punta Arenas (sur).
En Chile, suman 3′515,878 casos confirmados y 57,094 muertos desde la llegada del coronavirus al país en marzo del 2020.