Cerca de 2,600 millones de personas en el mundo están expuestos a niveles altos y extremos de enfrentar problemas de escasez de agua potable.
De acuerdo al informe “2020 Ecological Threat Register”, el sudeste asiático, el norte del África y Medio Oriente son los registran el mayor riesgos de la escasez del elemento vital.
En América Latina, Chile y México son los que registran una mayor vulnerabilidad al estrés hídrico.
El informe indica también que es probable que los efectos del aumento de las temperaturas, el crecimiento de la población y una mayor variabilidad de las precipitaciones reduzcan el suministro de agua en muchos países.
Ante ello, se estima que el número de personas que pueden enfrentar un estrés hídrico, cuando la demanda de agua es más alta que la cantidad disponible, llegaría a los 5,400 millones para el 2040.
De acuerdo al informe, actualmente hay un 60% menos de agua dulce disponible por persona que a principios de la década de 1960. Se destaca que la población está aumentando más rápido que la disponibilidad de agua.
Los países desarrollados, en promedio, consumen aproximadamente diez veces más agua por persona que los países en desarrollo, indica el reporte.