FOTOS | Cuando el keniata Eliud Kipchoge superó por 1 minuto y 18 segundos el récord mundial de la maratón de 42 kilómetros y 195 metros el domingo en Berlín, fue el mayor triunfo en la carrera del atleta.
Para Nike Inc., fue la primera vez en 15 años que un corredor logró batir la marca calzando sus zapatillas deportivas, ya que todos los récords anteriores desde el 2003 se lograron con zapatillas de su archirrival Adidas AG.
Kipchoge batió el récord del 2014 fijado por su compatriota Dennis Kimetto por el margen más amplio en años. El corredor de 33 años aparece en el polémico anuncio de Nike de Colin Kaepernick como el corredor "más rápido de la historia", inspirando a los millones de corredores no profesionales que intentan completar la famosa carrera de distancia cada año.
El atletismo es la categoría más importante de Nike, y generó US$ 5,200 millones durante el año fiscal que terminó el 31 de mayo, más del doble que su negocio de fútbol, y más que su marca Jordan y las ventas de baloncesto juntas.
La victoria es doblemente dulce para Nike, ya que Kipchoge dijo en el 2015 que no logró un mejor tiempo en la carrera debido a las zapatillas que calzaba. Kipchoge recorrió la distancia en 2 horas y 25 segundos en un circuito cerrado de carreras de automóviles en Monza, Italia, en condiciones que no calificarían para un récord mundial. El año pasado, la lluvia lo frenó en la maratón de Berlín, una pista rápida y plana en la que se lograron todos los récords mundiales desde que se otorgó ese honor a las carreras callejeras.